sábado, 30 de abril de 2011

DUBLIN DIA 12

“This was a triumph, i’m making a note here, huge success…”. Suena la alarma y me levanto. Son las 8 a.m. y el dia está soleado. Genial como para salir a trotar. Y ese es el plan en esta mañana. Salir a trotar. Pero algo raro hay en el cuarto. Indio Sonriente se ha ido. No sé que pensar ahora. Era un cómplice de Indio Conspirador? Era un random? Era un mensajero del más allá que vino a guiarme? Bueno, si era un guía del más allá se debe cagar de hambre, porque no me dio ni media pista de lo que tengo que hacer.
No importa. Tengo que aprovechar que finalmente me levanté temprano. Me pongo la ropa deportiva que inteligentemente dejé preparada la noche anterior y me voy a desayunar. Ah, el sabor de lo gratuito. Unas tostadas, un bowl con cereales y leche, 10 minutos de digestión y a correr se ha dicho. Tengo pensado dirigirme al parque al que fuimos con Mariana y Gallega a tomar mates el otro día. Se veía bastante grande, así que tendré bastante espacio para recorrer. Pero primero tengo que llegar al parque. Lo único que recuerdo es que tengo que seguir el rio hasta chocarme contra el obelisco gigante. No parece un camino muy difícil. Empezamos el trote. Un, dos, un, dos, un, dos, tres. Perdí el paso. Vamos de nuevo. Un, dos, un, dos, un, dos…Me detengo. Y no es porque estoy cansado. Bueno, si, es porque estoy cansado, pero también hay algo más: frente a mi se erige una torre. Si, una torre medieval, como esas de las películas, con almenas y todos. Amazing. Miro hacia el costado de la torre y hay una especie de castillo. Esto es demasiado. Tengo que averiguar que mierda es este edificio. Ya se que es un castillo, pero quiero saber motivos históricos y demás cosas de interés general. Por lo que veo estoy en la parte trasera del edificio, por lo que empiezo a rodearlo, buscando alguna entrada o algún cartel que me de alguna idea de que es lo que se para majestuoso ante mi. Tengo dos opciones, empiezo a rodearlo hacia la derecha o hacia la izquierda. Vamos hacia la izquierda. Claramente es el lado equivocado. Luego de dar prácticamente toda la vuelta a la manzana (y las manzanas de los castillos son algo mas grandes que las normales) encuentro una puerta. Cerrada. Un cartel en su entrada reza “Abierto a partir del 1 de Junio” FUCK! Pero cerca hay otro cartel. Parece ser que me encuentro en la fortaleza de Dublin, el edificio más antiguo de la ciudad. Y los hados tienen todo preparado, no se les escapa nada a estos guachines. Como si la emoción de ver un castillo fuera poca, en mi mp4, que siempre está puesto en orden aleatorio, empieza a sonar el tema “And the giants dance”. Si algún dia tienen ganas de sentirse medievales (si, acabo de inventar un sentimiento nuevo) tienen que escuchar esa canción. Es de un grupo alemán llamado SUIDAKRA. Pero el castillo está cerrado. Ya fue, lo asaltaré alguna de estas noches o buscaré en Gugel información sobre el mismo. Pero ya vi un castillo. Este día ya puede terminar. Pero no, los hados tienen algo más destinado para mi. En la vereda de en frente se encuentra una iglesia, con onda medieval también. Ya vi muchas, no vale la pena…salvo por un pequeño lugar a un costado de la misma, en donde leo escrito en grandes letras “KATYN”. Para los ignorantes, Katyn es una zona en Polonia en donde se llevó a cabo una gran masacre por parte del ejército ruso en 1939. Miles de soldados prisioneros de guerra, médicos, artistas, etc, fueron asesinados a sangre fría en lo que fue la llamada “MASACRE DE KATYN”. Para los pajeros que no les gusta leer hay una película también. Cuestión que este lugarcito tiene paneles pegados a sus paredes en donde se describe la masacre, se muestran fotografías y documentos de esa época, etc.  Algo me dice que estar escribiendo sobre masacres en Polonia durante la segunda guerra mundial va a ser motivo de algunos chistes por parte de algunas personas. Pero no me importa, soy un capo. Y digo la verdad. Muy interesante. Pero son las 10 de la mañana, y yo dije que iba a hacer ejercicio. Mejor sigamos trotando. Las calorías no se quemarán solas. Seguimos camino. Pero no por mucho. Justo cuando estoy por llegar al parque que representa mi destino primario me cruzo con un cartel gigante que publicita una exposición de cruces celtas en el museo nacional de Irlanda, que se encuentra a no más de 50 metros. Mierda!!! Pero no, lo dejo para la semana que viene. Ahora vine a trotar. Las cruces no se van a mover. Aunque conociendo mi suerte…
Una vez en el parque ya es más fácil. No hay nada que me distraiga. Empecemos…pero por dónde? Este parque es enorme…fuck. Y como haría mi amigo Micky Vainilla, vamos para la derecha. No hace falta que les describa todo el trote, les alcanza con saber que es un parque diseñado para andarlo en bicicleta. No a pata. IS FUCKING HUGE! Medio vivo medio muerto vuelvo a la entrada del parque una hora después. No doy más. Y todavía tengo 40 minutos de caminata hasta el hostel. Pero como ya se donde estoy veamos que tienen reservados los hados para mi. Cambiemos el camino. En una de esas me encuentro con algún edificio loco de nuevo. No. Nada. Y para colmo me perdí. Los cuarenta minutos de caminata se acaban de convertir en una hora y diez. No vuelvo a confiar en mi instinto de ubicación, está más muerto que mi vida sexual. Una vez en el hostel el destino primigenio es la ducha. Pero el problema es la ducha del hotel funciona como las canillas de los baños públicos. Es como un gran botón que presionas y se va cerrando automáticamente. Pero solo hay un botón, el del agua caliente. No puedo regular la temperatura. Y a estos forros les gusta el agua hirviendo. Cada vez que me ducho siento como algunas partes de mi ser se cocinan lentamente. Pero ya fue. De algo hay que morirse.
De la ducha al cuarto. Siestona. No, mejor voy a almorzar. El bagre me está gritando hace horas y yo como tengo los auriculares puesto no lo escuché antes. Improviso un arroz con tomate y cebolla fritos. Hoy aprendí a hacer arroz. Después de un fallido intento en el que tuve que desechar dos tazas del oriental producdo, finalmente pude cocinarlo bien. Luego de esta frutal comida finalmente llega la hora de la siesta. Musiquita, cerramos las cortinas, prendemos las velas y los saumerios, espero que entre Paris Hilton dispuesta a acostarse conmigo. Cinco minutos después termino admitiendo que las probabilidades de que ella entre al cuarto son muy remotas, está en EE.UU., sino claramente vendría. Dormir es la única opción que queda.
No se cuantas horas después me despierto. Y digo que no se cuantas horas porque no es que no tenga un reloj a mano, lo tengo, son las 6 de la tarde, pero no me acuerdo a que hora me acosté. Con esta incertidumbre en mi cabeza me visto y salgo a caminar. Me voy al local donde venden las Pasties, esas empanadas grandotas de las que les conté el otro dia. Allí me encuentro con César, un argentino que labura en el local y que me pasó el dato para ir a jugar a la pelota. Minutos después aparecen Pablo y su hermana, otros argentinos que acabo de conocer. Presentaciones aparte terminamos arreglando para salir a la noche. Veremos que nos depara la noche del sábado…seguro vuelvo en media hora y escribo una expansión para este update.



Pdta: me siguen llegando fotos de fans! Vamos todavía. Pero de todas formas ninguna foto de minas desnudas. Soretas, seguro que para Taringa y los3cabiados lo hacían.

viernes, 29 de abril de 2011

DUBLIN DIA 11

Hoy amenaza con ser un dia aburrido. Esto se está convirtiendo en rutina, y todos odiamos la rutina. Pero mierda! Estoy en Irlanda, estoy de joda. No voy a dejar que me gane la paja. Luego de masticar estos pensamientos acostado en la cama me levanto de un salto. Me caigo de nuevo en la cama luego de haber cabezeado la cama de arriba de una manera violenta. Quién carajo inventó las cuchetas metálicas? No importa. Con más cuidado esta vez me levanto, totalmente decidido a hacer algo interesante hoy. Medio mareado por el golpe me dirijo a la ducha. Una ducha caliente, jabón, repasamos todas las cavidades, no dejamos nada sin limpiar y acá dejo de dar detalles porque acabo de perder a la mitad de mis lectores mientras vomitan imaginándose mis cavidades. Sorry about that. Luego de la ducha vuelvo al cuarto. A esta altura no hace falta decir que me perdí el desayuno gratuito, again. Pero tengo excusa: anoche me puse alto pedito con los yanquis al ritmo de la música folk irlandesa (los videos en el face). Entro el cuarto semidesnudo, apostando al vacío que generalmente hay en la habitación cuando regreso de la ducha y me encuentro con una sorpresita: hay un nuevo Indio en el cuarto. Indio Conspirador no se da por vencido, y esta vez me mandó uno de sus compatriotas. Lo saludo y me siento en mi cama. Hombre extraño este. Flaco, debe tener alrededor de 35 años, una pequeña calva asoma en su cabeza…y lo que más me asusta de todo: no para de sonreir. Se acuesta en la cama y sonríe. Se levanta y sonríe. Se tira un pedo y sonríe. Saca un unicornio de su valija y sonríe. Y el unicornio tiene un parche. Esto no va bien. Tengo que pensar algo y rápido. Mejor me voy antes que siga sacando cosas de la valija. Parece el bolso de Mary Poppins. Chau, no puedo pensar con él al lado mio. Su sonrisa me vuelve loco. Y ese unicornio tuerto tampoco se ve muy amigable. Charlie The Unicorn las pelotas.
Me vengo al lobby a huevear un rato y analizar mi próxima jugada. No se que hacer. Estoy desconcertado. Muchas preguntas giran en mi cabeza…quién es este Indio sospechoso? Por qué sonríe tanto? Es un enviado de Indio Conspirador? Cómo perdió el ojo el unicornio? Mientras mastico todo esto sigo hueveando en la pc, viendo algún capítulo de Agatha Christie’s Poirot, logrando que me bloqueen en Facebook porque esto anda como la mierda, etc. Sobre este tema en particular: mientras comentaba algo en el face de un amigo se me tildó la interné, justo en el momento en que presionaba PUBLICAR. Lo próximo que sé es que no puedo comentar ningún estado de nadie, por un tiempo inderteminado que pueden ser horas o días. Qué carajo? Tengo que investigar. La respuesta salta a los ojos: en el estado de este amigo mi comentario se ha repetido unas 200 veces. Great. Ahora el Facebook me tildó de spamer. Pero alguien debe haberme denunciado. Si todo es como pienso esto debe ser obra de China Maligna. Mi razonamiento no falla, los chinos son genios de la informática, eso lo sabemos todos después de ver algunas pelis. Estúpida china. Te va a caber.
Cambiando el ángulo de la información rotundamente: todo el dia en Facebook no paro de er actualizaciones de estados puteando a Moyano, estados que dicho sea de paso, no puedo comentar. Y al leer esto agradezco mucho estar tan lejos del mundo civilizado.  Listo, bajada de línea hecha. Juro no caer de nuevo en la tentación de la política.
Volviendo a mis problemas en Irlanda. No sé que hacer…creo que me voy a poner a meditar debajo de una catarata. Tengo que encontrar una catarata primero. Me voy a buscarla. Estoy demasiado mal como para saber que escribir. Mañana les contaré mis conclusiones.


Pdta: Como habrán notado ya tengo un link a la derecha de la página que les muestra las fotos que me van mandando. Lo que todavía no entiendo es por qué solo hay dos fotos. Piensenlo, consultenlo con sus conciencias. “Es genial reirme con las pelotudeces que escribe este pero cuando pide un favor ni en pedo…” Agradezo de corazón a Sacu y a Kala, que a pesar de no ser las fotos que esperaba recibir por lo menos me hicieron reir un rato. Los quiero. 

jueves, 28 de abril de 2011

DUBLIN DIA 10

Me despierto. 10.00 A.M. Mierda, me perdí el desayuno de nuevo. No importa. Es un día soleado y las oportunidades son infinitas. La habitación se encuentra sola, para variar, así que puedo disponer de ella a mis anchas. Caminar en pelotas FTW. Repetimos la rutina mañanera: ducha, sepillado de dientes, manicura, pedicura, pedo, eructo. Y para no cambiar la rutina: vamos al lobby del hostel a tener una sesión de feisbuc. Pero el dia de hoy está destinado a ser distinto.  Cuando llego a recepción, Vanina (la argentina que labura en el hostel) me dice “che, Juan, llegó tu PPS NUMBER”. Finalmente. Ya puedo laburar legalmente. Solo me falta conseguir un laburo! Pero esto tiene una ventaja más: ahora puedo abrir una cuenta corriente internacional. Así que asi vienen los planes: feisbuc (first things first), después al banco ULSTERS a cambiar mis traveller checks, de ahí al banco del cual no recuerdo el nombre, solo la locación, donde puedo abrir la cuenta. Salteemos la parte del feisbuc, no creo que les interese saber las pelotudeces que hago en internet. Vamos al ULSTERS BANK. Luego de una pequeña fila llego a la banquera que atenderá mi pedido. Con mi mejor sonrisa saco el fajo de cheques de mi bolsillo y le digo “loca…cámbiame los chequé, quiero cash nena…CASHHHH” Pero hay un inconveniente: el límite de cambio diario son 1000 euros. No voy a decir que tengo 2500 euros para cambiar…es inseguro dar cantidades por la interné. Bueno, cambiaré 1000 ahora y el resto mañana y pasado mañana. La cajera tiene que seguir cierto procedimiento de seguridad, se ve que no es común cambiar tantos traveller checks de una. No importa, tiempo es lo que me sobra y además los cheques son originales…espero que lo sean por lo menos. Lo son. Genial. Luego de unos minutos salgo del banco con 990 euros en la mano. Si, la burocracia me acaba de cobrar el %1.00 de la cantidad total de la transacción. No importa, mientras no lo traduzca a pesos argentinos no duele tanto. Mierda, son 60 mangos. LADRONES!. Pero ya estoy afuera del banco, no puedo quejarme. Ahora a caminar media cuadra con las bolas en la garganta rogando que al chorro de turno no se le ocurra afanarme. Nada, los chorros andan descansando, se ve que en Irlanda también se duerme la siesta. Adentro del otro banco (que sigo sin saber su nombre) me dirijo a la caja para pedir direcciones en cuanto a abrir la cuenta internacional. La agradable cajera realiza un corto  llamado telefónico a una de sus colegas y me indica que vaya al primer piso por las escaleras que nacen a escasos metros de donde me encentro parado, me dice que Carol está esperándome arriba. Suena a bulo, pero es un banco. En el primer piso efectivamente Carol me está esperando. Luego de una corta charla y la firma de los documentos pertinentes soy dueño de mi propia cuenta de banco internacional, además de haber depositado los 990 euros dentro de la misma. Genial. Mañana tendré que cambiar el resto de los traveller checks, pero el paso importante ya está dado. Ahora de vuelta al hostel. Hay que almorzar. Mientras camino diseño en mi cabeza lo que será el sanguche que voy a comer. Cerdo (si, yo puedo comer cerdo…no se el resto), cheddar, cebolla, tomate, mayonesa al ajo. Como el gol de Maradona a los piratas ingleses…fantástico.
Estoy satisfecho. Esto de la cocina se me está dando bastante bien. Deben ser los genes. Nunca más comeré en Mc Donalds. Bueno, mentira, pero si voy a cocinar más seguido. Siguiente paso del día…no lo hay. Improvisaremos.
Que gran herramienta la computadora. Estoy en contacto con todos como si estuviera en mi cuarto amazing. Y lo mejor de todo: recibo grandes noticias por msn. Las noticias en si no tienen importancia para el resto…lo que importa que es ahora tengo un motivo para celebrar. TEMPLE BAR allá voy! Guardamos la netbook en la mochila, la mochila en el cuarto y la loba en la cueva, o algo así. Salgo para los bares. Diez minutos después llego a THE AULD DUBLINER. Uno de mis favoritos por ahora. Y adentro lo que más me gusta: música en vivo. El músico a cargo toda la guitarra y canta bastante bien. Y lo mejor de todo: está tocando temas clásicos irlandeses. Melodía como FAIRYTALE OF NEW YORK o WHISKEY IN THE JAR suenan en los parlantes. Fantástico. Todo apunta a que hoy puede cumplirse mi fantasia. Todavía no les dije cual es, no desesperen. Mi fantasía se reduce a estar en un bar irlandés, tomando Guinness y que alguien cante en vivo y en directo THE WILD ROVER. Escuchenlo. Es un tema que es una fiesta por si solo. En el medio de dos canciones el músico a cargo de animar la velada pregunta si hay alguien que tenga un tema para pedirle…es mi momento. “THE WILD ROVER” grito. No sé cómo, pero el señor guitarrista escuchó mi grito desesperado. “The wild rover está viniendo…pero no todavía joven padawan”. Listo, tengo que esperar nomás. Mientras tanto se me pongo a charlar con unos yanquis que están igual de enfiestados que yo. Vale la pena remarcar que recién son las 7.30 de la tarde. Estos yanquis están celebrando los 60 años del padre de la familia. Son el cumpleañero, el hijo y el yerno. Genial, muy buena onda, hablan inglés entendible. Y nos ponemos a charlar de la vida mientras disfrutamos de nuestras respectivas Guinness. A los 5 minutos aparecen Gallega y Mariana que vinieron por pedido mío. Genial, la fiesta se re pone. Entre canción y canción no pierdo oportunidad de remarcarle al showman que todavía me debe THE WILD ROVER. Y se hizo esperar el guachito. Pero me dio el gusto. Como a las 8.30 de la noche me mira, hace un gesto con la mano y empieza a cantar THE WILD ROVER. Puedo morir contento señores. Que fiesta. Y tengo un video del evento. Para colmo los yanquis estan de buen humor. Me regalan un par de pintas para seguir celebrando. Que genial.
Y todavía no entiendo como hice para escribir este post sin errores de ortografía…por las dudas mañana lo reviso.


Pdta: todavía no recibí fotos. Vamos a cambiar el pedido: no es necesario que sean fotos sexys. Pero necesito fotos de gente random con carteles que sigan “elviajedelpelado.blogspot.com”. Es mucho pedir soretes?

miércoles, 27 de abril de 2011

DUBLIN DIA 9

Resaca. Hacía rato que no me pasaba, pero la cerveza con la sidra claramente no tienen un buen efecto en mi sistema. No importa. Nada puede detenerme, nada podrá evitar que hoy haga lo que tengo que hacer…NADA. Porque hoy no tengo que hacer nada, más allá que mandar mails con mi Curriculum. Nada del más allá y nada que no pueda ser realizado con un leve dolor de cabeza y algún que otro revoltijo en el estómago. Me levanto y arranco el día. Ni ganas de ducharme o higienizarme hoy. Estoy de mochilero en Europa, voy a meterme de lleno en ese papel. Basta de afeitarme, basta de ducha diaria, basta de cambiarme la ropa interior regularmente. HIPPIES FOR THE WIN. Así que me pongo la misma ropa que anoche que todavía conserva ese agradable olor a cigarrillo y alcohol y me voy para el lobby del hostel a conectarme. La mañana pasa sin penas ni glorias. Un capítulo de serie que me mantiene adicto en estos momentos, repetimos el envío de curriculums, charlo con las recepcionistas del hostel, Reneé, Jess, Vanina y Laura. Chicas agradables y divertidas. De golpe una idea que viene revoloteando en mi cabeza desde que llegue a Dublin retoma fuerza, y les pregunto por Indio Conspirador. Me dicen que su nombre es Jamish…les digo que no me importa su nombre, que yo ya lo rebauticé, pero que quiero saber que planes se trae entre manos, que está tramando. Un ataque terrorista? Trata de blancas? Revolución armada para imponer algún régimen extraño? Las expresiones en los rostros de las chicas son variadas, pero creo que todas coinciden en un punto: este flaco está del marote. Claramente Indio Conspirador es un jugador sabio. Sabe Cómo disimular, ha recibido buen entrenamiento. Pero no lo suficientemente bueno, YOU CAN’T FOOL ME BITCH!. Tendré que buscar otra forma de averiguar sus planes.
Se hacen las doce y me pica el bagre…again. Robin, a la baticueva. Pero primero a la cocina, dije que tengo que hambre. Hoy vamos a intentar algo distinto. Un salteado mixto. Bifes de cerdo trozados, tomate, cebolla, todo con un poquito de sal y aceite y pasado por la sartén. Oh la lá Danette! Un bocatto de cardinale. Y para finalizar: quesito cheddar, que se derrite bajo las sublimes holas de calor provenientes de los recién salteados ingredientes. Qué bien lo estoy pasando. Mientras disfruto de este almuerzo de reyes me llega un mensaje del Guille. Tenemos que juntarnos a ver el partido del Barca. Los que me conocen deben estar diciendo “el Pelado se hace el seguidor del fútbol para hacerse el langa pero es un gil”. Tienen toda la razón. Pero para variarla rutina está bueno hacer algo distinto. Así que vengo siguiendo al Barca (no sé cómo poner la C rara…esa C portuguesa con el firulete abajo). Cuestión que tenemos que organizarlo. Simple: nos juntamos a las 19.30 en el hostel y ponemos la tele de acá. Nada de ir a un bar lleno de gallegos brutos que no entienden nada. Y donde cobran entrada. Listo, ahora solo tengo que hacer tiempo hasta las 19.30. Sigamos mandando c.vs. Nunca se sabe. Me voy a la cocina a hacerme un café y me encuentro con el personaje del día. A este ya lo conozco desde hace como una semana, pero lo estaba guardando como mi comodín. Se llama John, y yo lo apodo Rosita. Y aquí está el por qué: desde que lo vi hace como una semana está vestido igual. Una de dos: o no se cambia la ropa o su guardarropas se ve como el de Marge Simpson, un vestido verde al lado del otro. Borcegos de cuerina rosa, juean oscuro, remera rosa, pelo corto rosa, cinturón con tachas rosas, pulseras con tachas blancas y rosas, aritos varios de varios colores, incluyendo el rosa, y al ser irlandés su tez tiene un tono rosado también. No fue difícil apodarlo. Un hombre extraño y reservado…al principio. Luego de 5 minutos de charla es insoportable. No para de hablar. Asi me enteré de varios detalles de su vida. Practicó kempo, los tatuajes que tiene son todos sobre historias de piratas, vive en el hostel porque le parece divertido. Este viaje cada vez tiene menos sentido. Me falta conocer a Predator y a Alf. Luego de un rato interminable de charla con John invento alguna excusa barata y me voy a mi cuarto.
Necesito una ducha. Ya! Esto de la vida del hippie no es para mí. Me apuro y me meto en la ducha caliente, jabon, cepillo de dientes, talquito, perfume, piedra pomes y crema exfoliante. Todo el combo. Ahora si me siento una persona. Siguiente paso: cambiarme de ropa. Desarmo la mochila (que dicho sea de paso ya aprendí la técnica para guardar todo y que quepa bien) y selecciono un vestuario distinto. Me cambio y vuelvo a guardar todo. Ahora puedo volver al lobby. Tengo la pc, tengo la mochila, tengo los anteojos, tengo el celular, pero me falta algo. La tarjeta/llave del cuarto. Dónde mierda estará? Debajo de la cama, negativo. Sobre la cama, negativo. Atrás de la cortina, negativo. Tal vez me la dejé en el baño, pero no tiene sentido, no hubiera podido entrar al cuarto para cambiarme. De pronto se prende el foquito arriba de mi cabeza. La dejé en el bolsillo del otro jean que tenía puesto. Y dónde está el jean? En el fondo de la mochila. Fuck! A desarmar todo de nuevo. Paja no brava, bravísima. Pero bueno. Es eso o pagar 5 euros de la tarjeta nueva. Mis genes ahorradores (entendidos) entran en acción. Veinte minutos y muchas puteadas después tengo la llave del cuarto. Vamos al lobby a huevear un rato más. Oh sorpresa, quién está nuevamente en el mostrador? Indio Conspirador. Volviste, volvimos. Y su sonrisa. Me siento a esperar a que llegue Guillermo. Gracias a Dios no tarda casi nada.  Nos sentamos en el sillón frente al LCD del lobby y empezamos a buscar en que canal van a dar el partido. Automáticamente Indio Conspirador se acerca. “Las pelotas Indio, vamos a ver el partido…ni se te ocurra decir que no podemos”. Pero sus intenciones son distintas. Se nos une. Resulta que es hincha del Manchester UTD, por lo que quiere ver quién gana para saber contra quién jugaría la final su equipo. Así que vota por el Madrid. Claramente es una indirecta. Me está desafiando porque sabe que yo hincho por el Barca. Quiere hacerse el sutil pero soy demasiado inteligente. THE GAME IS ON. El primer gol de Messi lo grito. Es la primera vez que grito un gol viendo un partido de fútbol. Y me siento un total idiota. Lo mismo piensan todos los extranjeros que sentados en el lobby continúan con sus respectivas actividades luego de mi sonora interrupción. Pero mi objetivo principal está  logrado. Indio Conspirador se siente más incómodo que yo. Cuando cabe, cabe. No hace falta decir que el segundo gol de Messi (que golazo puta madre!) lo observo con una sonrisa nomás. Indio Conspirador se retira, derrotado. Vaya a cucha! O al mostrador, lo que más te guste. Es suficiente…me retiro a mis aposentos victorioso. Pero la guerra todavía está muy lejos de terminar...


Pdta: TENGO UN PEDIDO: me obsesioné con la idea de hacerme famoso. Y este es mi primer intento. Necesito que aquellos que lean este blog y se copen se saquen fotos desnudos sosteniendo un cartel que diga “ELVIAJEDELPELADO.BLOGSPOT.COM”. No hace falta decir que si son mujeres mejor, pero con fotos de hombres también puedo trabajar, asi tenemos cosas para todos los gustos. Si se copan  y se sacan la foto mándenmela a mi mail y la publicaré para hacer publicidad. LOS AMO. (esto no es un intento por ver mujeres desnudas…lo juro.)

DUBLIN DIA 8

Noche de mierda. Me acuesto tipo 12 de la noche, luego de ver un capítulo de “Agatha Christie’s Poirot” y me sumerjo en el hermoso mundo de los sueños…por un rato. Un par de horas después, me despierta un motor. Pero se ve que anda mal, porque no hace ruido constante, sino que mantiene un ritmo. “Llevalo el mecánico ratón!” pienso…y cierro los ojos nuevamente. Pero el ruido del motor sigue. Y lo más loco: no parece alejarse ni acercarse…es como si estuvieran tratando de arrancarlo. Esto amerita un vistazo desde la ventana. Oh sopresa! No hay ni un solo auto en la calle. Debo estar escuchando audiciones. Pero no. No puede ser. Me pego una cachetada para terminar de despabilarme y finalmente entiendo. El sonido no viene de afuera de la habitación sino de adentro. Y no es un motor...es el gordo que duerme en la cama de al lado. Hijo de re mil putas!!! Excuse my french. El señor tiene una fábrica adentro de sus pulmones. Amazing. Bueno, una vez resuelto el misterio no me queda otra opción que volver a la cama. No sé cuántos de ustedes han tenido que dormir al lado de una licuadora/ciclomotor/cohete de fusión atómica (“Y no hace nada de ruido!!!” Benditos sean los Simpson que me dan ejemplos para todo), pero a los que les haya pasado saben que es imposible dormir. Bueno, yo lo acabo de experimentar. Traté de todo, desde taparme las orejas con la almohada, cambiar de posición, hacer ruido a propósito tratando de despertar al susodicho, ponerme auriculares, prender el mp4, incluso tratar de acostumbrarme al sonido de este hombre como cuando niños jugábamos a buscarle ritmos al ruido del ventilador de techo por las noches!!!. Pero nada, los resultados son los mismos: NO PUEDO DORMIR. Justo cuando mi desesperación está llegando al límite sucede el milagro. Un yanky que comparte el cuarto esta noche (y parece ser que se encuentra en la misma situación que yo) se levanta y sacude al carburador humano para despertarlo. La única explicación que le da al soprendido roncador es “Estabas roncando como una marmota, no podemos dormir así…disculpá”. Y se vuelve a meter en la cama. Que valor, que huevos y que poder de resumen!!! Mi nuevo héroe se llama Yanky. Tendré que reclutarlo para la lucha contra Indio Conspirador y China Maligna. Hablando de eso…no me sorprendería que el roncador fuera un aliado de ellos, o un simple enviado para volverme loco. Son astutos, pero todavía no me superan. You can’t fool the master!.
Luego de esta victoria total me duermo nuevamente, para despertarme a las pocas horas. Hoy tengo que ir al banco y a seguir en la búsqueda de alguna actividad que me permita estirar el viaje todo lo posible. Al levantarme noto que el carburador humano sigue durmiendo. Es mi oportunidad. Creo que nadie jamás hizo tanto ruido para levantarse de una cama y agarrar su toallón. Y solo por las dudas abro la cortina que bloque el paso de luz hacia el ya no tan plácido rostro de nuestro amigo roncador. Conchi tu má! Cuando regreso de la frugal ducha el sujeto en cuestión ya se encuentra totalmente despierto. Si sus planes eran dormir hasta tarde claramente falló.
Próximo paso: internarme en la interné a mandar curriculums. En algún momento surgirá un trabajo. Nada del otro mundo para contar: búsqueda online, mandar c.v., búsqueda online, mandar c.v…creo que se imaginan el resto. Y si su imaginación es lo suficientemente buena sabrán que me aburrí como una ostra. Mejor salir a caminar en busca del personaje del día.
Y aca voy a hacer un llamado de atención. Y es serio. Vengo caminando por la calle y llego a una avenida en donde el tráfico se encuentra detenido por el semáforo. Habrá una cola de 30 metros de autos. Y de fondo el sonido de una ambulancia, que viene andando ligerita pero que al llegar a la cola de autos se detiene por razones obvias, ese estúpido concepto de la física que dice que dos cuerpos no pueden ocupar el mismo espacio en un mismo instante. Bueno, cuestión que se detiene. “Acá te quiero ver…”. Pero mientras pienso esto sucede algo maravilloso. Los peatones automáticamente dejan de cruzar, dejando espacio para los autos del frente para moverse hacia adelante. Todos empiezan a movilizarse, incluso un auto sube las ruedas delanteras al cordón. En menos de 15 segundos la ambulancia puede pasar a través de los autos y seguir su camino. No hubo ni un solo bocinazo ni una sola queja. También falta el vivo que se tendría que haber pegado a la cola de la ambulancia para salir rápido. Nada. Impecable. Sinceramente me pongo de pie y aplaudo. Y a estoy de pie. Mejor aplaudo. Luego de dos palmadas me doy cuenta que nadie me va a seguir en el aplauso. Sigo caminando.
Después de girar un rato y no ver nada extraño, me lo encuentro a Guille adentro de un local donde venden Pasties. Como estoy seguro que no tienen idea de que son las Pasties les explico: piensen en la foto de una empanada. Abren la foto con paint. Tocan ctrl+W y la agrandan un %175. Bueno, ahí tienen una pastie. Si, es una empanada más grande. Pero tengo demasiadas palabras en la cabeza como para explicarlo de manera simple. Esta es la parte en donde más de uno va a abrir el paint para fijarse qué carajo pasa cuando tocan ctrl+W.
Nos quedamos charlando y me comenta que las noches de los martes hay un boliche llamado Daisyes, que abre sus puertas a partir de las 8 de la noche que después de pagar una entradita de 5 euros adentro podés conseguir cualquier pinta de cerveza y hamburguesas enormes todo por 2 euros. Teniendo en cuenta que el promedio de precio de una pinta anda por los 4 euros en cualquier bar cualquier noche esta es una buena oferta. No hay que decir más. “Más bien guachín”. Pero hay un inconveniente. Es para mayores de 21. Mierda. Estúpida minoría de edad. Tengo que pensar en algo. Empiezo el retorno al hostel. Llego y me siento con la pc en el lobby. Se me acerca René, una de las australianas que atienden en recepción y me dice “Los martes a la noche hay un boliche por acá cerca con cerveza y hamburguesas re baratas, por qué no le decís a tus amigos y se vienen?” Tengo que pensar en algo, ya. Y de golpe un rayo de luz me ilumina: tengo dos pasaportes. No uno, sino dos. El italiano y el argentino. Ya fue, falsifico el argentino, total para moverme por acá solo necesito el italiano, y para volver a argentina…bueno, todavía falta para eso, tengo que resolver problemas más urgentes. Saco mi pasaporte de la mochila y agarro mi marcador indeleble ultrafino (“SIEMPRE LISTOS!”). Como todos ustedes sabrán el pasaporte tiene plástico sobre la foto y sobre toda esa página, por lo que si escribo sobre el film luego lo podré sacar con alcohol. Y a está todo solucionado. Manos a la obra. Veamos si un año entero de cursar falsificaciones y adulteraciones da resultados. Se ve que la cursada de esa materia dio resultados porque la teoría la tengo fresca como una lechuga. Pero todos saben que todavía debo caligrafía. Las modificaciones me quedaron horriblemente mal. Con esto no engaño ni a un murciélago miope. Tengo que pensar otra cosa…pero no tengo tiempo. Tengo que cocinar todavía y después salir para el cheboli. Haré como hago desde los 16: saldré sin ningún tipo de identificación y apostaré a mi simpatía y cara de viejo. Cocino a las chapas y me cambio. Nos encontramos con Guille y Mariana en una esquina y empezamos a andar. No es muy lejos. Llegamos a la puerta y nos quedamos parados. Dos guardias del tamaño de Hulk Hogan aguardan en la entrada, pidiendo identificación a todo el que intenta pasar. Obviamente hay varios que se quedan afuera debido a esto. Pero ya estamos acá…vamos. Se manda Guille primero y yo me pego a su espalda y cuando llegamos a los patovas...
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

Suspense….
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
ENTRO. Pensaron que me iban a rebotar soretes? Se olvidan que soy un capo. Mientras paso saludé amablemente al patova el cual respondió mi saludo con un amigable “Have fun guys!”.
Adentro el boliche es enorme. Está conectado a un hotel 5 estrellas. Bien chetito es el lugar. Pero cuando digo enorme es ENORME. HUGE. Y no tiene la onda de los boliches argentos. Al contrario, tiene la onda que me gusta a mí. Un lugar semitechado, música fuerte y la gente parada con sus vasos en la mano, bailando un poco, charlando, etc…genial. Amo este país gentuza. Lo mejor de todo: no hay atisbos de que vaya a sonar algo relacionado con el reggeaton. PARADISE. Adentro nos encontramos con las australianas del hostel y nos ponemos a charlar…muy buena onda. Todo el mundo se divierte. Pero hay algo que me llama la atención: no hay colorados. Donde están los irlandeses? Resulta que este es un bar destinado principalmente a turistas. Yo como estoy desempleado no me di cuenta, pero estamos de fiesta un martes. Claro. Girando y girando por el boliche nos ponemos a charlar con brasileros, gallegos, tanos, franceses…es como un popurrí de nacionalidades, todos divirtiéndose y tomando. Un plus: en pantallas estratégicamente distribuidas dentro de boliche están pasando el partido del Manchester UTD. Dos veces se estremeció el boliche bajo los gritos de GOL. Es increíble, estamos rodeados de mujeres hermosas, tomando, escuchando música, pero ningún hombre se perdió jugada del partido. Unas horas después Guille me presenta a un amigo que se acaba de encontrar. “Este es el panameño que te conté que está de la nuca”. Y ciertamente lo está. Muy divertido el loco. Bailando en estado de éxtasis (si, claramente consumió) no para de gritar y moverse. “Tome capitán! Su mano está vacía!” y me da un vaso con sidra. Seguimos bailoteando y de golpe veo al panameño que me señala su mano. Me acerco para escuchar que dice y me tira “Mire mi mano capitán, préstele atención a mi mano” y de golpe le toca el culo a una señorita que pasaba. Esta escena la repite como cinco veces seguidas, siempre llamándome capitán. Seguro que es marino….

lunes, 25 de abril de 2011

DUBLIN DIA 7

Genial, nuevamente me pierdo el desayuno gratuito por despertarme tarde. Fuck!!! Pero bueno… el desayuno ya me lo perdí. Me quedo una horita más en la cama. Es feriado nacional en Irlanda, por lo que no hay mucho que pueda hacer. Una hora después me levanto. Como todas estas mañanas la habitación se encuentra sola. La gente que está de paso en el hostel, solo por una noche ya se fue, y como soy el único fijo del cuarto dispongo de él a mis anchas prácticamente todo el dia. A pegarme una ducha. Pero primero tengo que trabar la puerta para que no se cierre. En este hostel tienen un sistema que desactiva todas las tarjetas de entrada a las 11 a.m. por seguridad. Si tenes que volver al cuarto después de esa hora tenés que reactivar la tarjeta en recepción. Así que pongo un tope en la puerta y me voy a la ducha. Varios de ustedes estarán pensando “DEJA LA PUERTA DEL CUARTO ABIERTA EN UN LUGAR LLENO DE EXTRAÑOS…LE VAN A AFANAR TODO”. No me subestimen queridos mortales. Se olvidan de un pequeño detalle: SOY UN CAPO. Resulta que he desarrollado un sistema de vigilancia. El baño con ducha se encuentra saliendo de mi habitación hacia la derecha, y dentro del baño hay un espejo. Si dejo la puerta asomada y evito que se empañe el espejo puedo espiar quien entra en el cuarto. Ajá! Nada se me escapa. Cuando se convive con Indio Conspirador y China Maligna nunca se puede ser muy precavido. Bueno, me ducho y vuelvo a la habitación. Nada fuera de lugar. Genial. Mi territorio está a salvo…todavía. Me cambio, me voy al lobby. Sesión feisbuquera y a ver que hacemos. Supongo que tendré que hacer lo que hace la gente acá cuando está aburrida. Si no hay otra cosa que hacer…pinta birra. Y así como quien no quiere la cosa salimos para Temple Bar. Y hoy la decisión es fácil: repetimos bar. Buena música, buena birra y barra de bronce que refleja mi hermosa figura. Hoy no hay banda en vivo, pero tienen puesto un disco de The Dubliners. Gol. Y ya que estamos vamos a cambiar de cerveza también. Por más que ame la Guinness tenemos que probar otras cosas. Hoy nos tomamos una roja. Minutos después suena en los parlantes “The town I loved so well”. Una lágrima asoma en mis ojos. Que temazo!!! Bajenlo. Ya. Los espero…
.
.
.
.
.
.
Ahora escúchenlo, los espero…
.
.
.
.
.
.
(genial, robé espacio gratis, soy un capo).
Si no les gustó el tema no sigan leyendo. No se merecen mi respeto.
Bueno, veo el fondo del vaso, y el disco de The Dubliners ha llegado a su fin. Mi misión en este bar terminó. Vamos a dar una vuelta por el centro. Caminando y caminando llego a un lugar que llama mi atención. Y esto va dedicado especialmente para incrementar la envidia de cierta persona protectora de los animales. Si, vos, que en este momento estás diciendo “ah! El gran Juan Calvo me está dedicando algo!” Bueno, para vos. Es un local de miniaturas. Entro y solo veo miniaturas, pintadas a mano, con todos los escenarios de “El Señor de los Anillos”. Venden todos los escenarios para pintar a mano y luego para jugar las batallas: Helm’s Deep, Moria, Gondor. Todas. Y ultra baratas. Y un nivel de detalles envidiable. Listo. Chau. Repito: ESTA ES MI CIUDAD! La pinta de cerveza roja empieza a hacer efecto. Al hostel de nuevo a dormir una siestona.
Tres horas después me levanto con una picasón en la zona abdominal. Más bien, debajo de la zona abdominal. En otras palabras, me pica el bagre. Y ya son las nueve de la noche. A cocinar y de vuelta a la cama. Hoy dia nublado, no pude haberlo aprovechado de mejor manera. Birra, siesta, cena, dormir. Nos vemos mañana.

domingo, 24 de abril de 2011

DUBLIN DIA 6

Hoy me despierta no la agradable alarma que tengo en el celular sino un enérgico sacudón. Antes de abrir los ojos ya estoy preparado para la batalla…cierro los puños y al grito de “querés jugar de manos hijo e’ puta?” me pongo en pie de un salto. Un anonadado Stefan me mira como preguntándome “que carajo fumaste?”, “Disculpá man…creí que eras Indio Conspirador…nunca se sabe con estos hijos de puta…” La expresión de Stefan no cambia en lo absoluto. Le pido disculpas. Claro. Me despertó para saludarme porque se va para Londres. Buena onda el loco. Lo agrego a Facebook (vamos sumando contactos europeos con casas en europa…gol) y nos despedimos. Pibe macanudo. “Ve con Dios, hijo de la luz…que Thor y Vishnú guíen tus pasos”.
Me pongo a escribir en la pc y alguien toca la puerta. Y quién entra? China Maligna con la que yo supongo su madre. Me mira, la miro, nos miramos. El odio se refleja en su rostro, pero yo no puedo decir nada. No puedo dejarle saber que yo sé. La saludo con una hermosa sonrisa digna de la Gioconda y le digo que ya recuperé mi toalla…y no gracias a ella. Me pregunta que cómo la conseguí y le digo que me la dio la chica de recepción. Error. Ahora temo por la de recepción. Si le pasa algo va a ser culpa mía. Mejor la vigilo por las dudas. Ducha, cambio de vestuario y al lobby a huevear en Facebook. El día está re nublado y cero ganas de salir. Encima es domingo, no puedo ni ir al banco.
Como el día pinta aburrido aprovecho y cuento. Los irlandeses son gente rara. Acá la gente no saluda. Pero no por maleducada o por ortiva. Yo saludo siempre preguntando cómo va el dia y me responden con la mejor onda. Pero no es la regla. Es la excepción. Pero los voy a convertir a mi movida. Voy a empezar a aplicar el saludo aleatorio en la calle. Ya van a ver…Crónica me va a venir a entrevistar a Dublin. (“yo venía pisteando como un campeón…”) Pero la gente tiene buena onda. Otro detalle divertido: ves borrachos en la calle a cualquier hora. Pero no alcohólicos. Borrachos, de esos que no entienden nada, que salieron de joda la noche anterior y no se enteraron que estaba amaneciendo. El mejor que vi hasta ahora fue uno durmiendo en el costado de la calle, abrazado a una botella de güisky abierta. Pero no era un linyera. Era un tipo muy bien vestido…para mí que el loco se tiró a dormir voluntariamente, no fue que se cayó o algo. Al tipo le debe haber dado toda la paja llegar hasta su casa y mandó todo a la mierda. Pero lo bueno es que tenía el desayuno listo entre sus brazos.
Esto se está tornando aburrido. Mejor salgo. Me paro, dejo la mochila en el cuarto y me voy para Temple Bar. Lo genial de esta zona es que está a 5 cuadras del hostel y son TODOS bares. Entonces podés elegir el que más te guste en el momento. La idea es no repetir bar. Llego a Temple Bar y me encuentro con el personaje del día. Si leyeron hace dos días recordarán que fui al museo del Leprechaun, esos enanitos verdes que según el mito guardan su olla de oro al final del arcoíris (http://www.youtube.com/watch?v=1JO0-WCEOw4 aca tienen un ejemplo). Bueno, estoy caminando por Temple Bar y en la placita central veo a un enano, midget, persona pequeña…en fin, enano, vestido como un Leprechaun y con barba naranja. Casi muero de un infarto. Por poco y me abalanzo sobre él a sacarle donde tiene escondido su oro a los golpes. Luego de este primer impulso de violencia que por suerte logré manejar, el siguiente impulso fue empezar a reirme. Pero como todos saben, los Leprechauns no suelen ser buenos. Este no era la excepción. Se dio cuenta que lo estaba mirando y me miró a su vez. La cara de ojete que puso cuando vio que en la comisura de mis labios asomaba una sonrisa no tiene nombre. Tengo miedo. Mamá, por favor vení a buscarme (y traeme un calzoncillo). Mierda que cagazo que me dio el enano ese. Cara de malo que puso…parecía Dany Trejo pero pelirrojo y sin bigote. Mejor sigo caminando. Tengo que elegir a que bar entrar. Lo genial es que la decisición es ver a que bar entro, no que cerveza voy a tomar. Eso ya está decidido por default: GUINNESS. Pero sigo sin saber dónde. Mientras recorro este laberinto de decisiones en mi cabeza, escucho un irish whistle. Si, la misma mierdita que me compré yo, pero en acción. Debe ser el flautista de Hammelin el que está tocando, porque automáticamente me dirijo hacia allí, como hipnotizado. La música viene de un bar medio oculto en una calleja. En la puerta un cartel reza “FREE LIVE MUSIC 7 DAYS A WEEK”. Encontré mi lugar. Bah, no, el lugar me encontró a mí. Por adentro el bar es muy similar a los otros. Techo bajo, principalmente hecho de madera. Mesas redondas con butacones, luz baja, sillas cerca de la barra que recorre toda la pared del local. Un detalle que me encanta: la barra de la pared está hecha de reluciente bronce. Genial, puedo mirarme a mí mismo mientras tomo. Orgazmo (si, es con Z, mi blog, mi gramática). En un pequeño escenario se encuentran dos músicos: el primero sostiene una guitarra acústica con la bandera de Escocia y canta a su vez con muy buena voz. Pero es el segundo el que atrapa mi atención, más bien su regazo es el que atrapa mi atención (chistes fáciles, abstenerse). Sobre sus piernas descansa una Irish Bagpipe, o gaita irlandesa. Definitivamente encontré mi lugar. Me pido una Guinness y me siento en la barra de bronce para mirarme. El show consiste en que alguno de los bebedores de público les pida a los músicos que toque un tema y ellos lo tocan. Increíble. Me quedo sentado ahí. Me muero de ganas de pedirles que toquen WILD ROVER, pero con la suerte que me caracteriza seguramente no la saben o es una canción prohibida en Irlanda…o simil. Me quedo con las ganas. Tal vez en otra ocasión. Dos horas y unas Guinness después me vuelvo al hostel. Pero antes una parada en el super. Basta de comer en Arcos Dorados. La era de la cocina ha comenzado para mi. Ahora, qué mierda compro? Qué es lo que sé cocinar además de los omeletes? La respuesta es nada. Bueno, que sea lo que Dios quiera. Yo me llevo unos bifes de panceta, queso, pan para los sangúches y huevos (hay que tener un plan B, siempre).  
De vuelta al hostel. Ahora si. Una sesión más de feisbuc (acaba de pasar algo muy loco: quise escribir Facebook como suena y como lo ven antes de este paréntesis y el Word automáticamente me lo corrigió…fuck it! Mi blog, mi gramática estúpido programa!!!) y a cocinar. Milagrosamente los sangúches increíblemente bien. Y no me quemé. Pero no hay nadie mirándome, como en los Simpson cuando el policía tira el sombrero al piso y éste rebota y se coloca de nuevo en su cabeza.  Una cagada. Pero por lo menos estoy comiendo algo hecho con mis propias manos. Ya no hay nada que pueda detenerme…soy como Morgan Freeman en “El Todopoderoso”. Mientras ceno llegan Mariana, Guillermo y Gallega. Pero Gallega se despide rápidamente porque tiene que volver a su casa temprano. Nos quedamos con el Willy y la Marian cenando todos juntos y a los 10 minutos se nos une Marianella. Entre charlas y chistes idiotas de mi parte aparece un personaje oscuro del hostel del cual todavía no hablé porque estoy tratando de descifrarlo, pero ya fue. La mano viene asi: es un hombre que está todo el tiempo de traje. Llegó al hostel el mismo día que yo. Se pasa horas de horas sentado en los sillones del lobby. No habla con nadie. Si le hablás te responde con monosílabos. Claramente es un tipo deprimido. Con los chicos nos ponemos a proponer teorías, y la que va ganando por ahora es la mía. Para mí la mujer lo hechó de su casa. Porque la gente en un hostel o que está de viaje no se trajea. Eso indica que tiene un laburo, o que lo  tuvo hasta hace poco. Es local, porque tiene acento irlandés. Y si te quedas en un hostel es porque pensás que es algo pasajero, porque si no te irias a lo de familiar o un amigo o alquilarías algo. Bueno…esas son mis teorías. Esperemos que el señor Felicidad no frikee y nos cague a tiros a todos. No tengo ganas de ser un superhéroe y tener que salvar a todos los del hostel. Aunque pensándolo bien…

DUBLIN DIA 5

Suena la alarma. “This was a triumph, I’m making a note here, huge success…”(8). Hace dos días que no me despierto temprano. El plan para hoy es ir a la distilería Jameson con Guillermo y Stefan Montag, un alemán que entró a mi habitación ayer y con el que pegamos buena onda. Antes de continuar me parece acertado hacerles saber que recuperé mi toalla. Pero no gracias a la China Maligna (ese es su nuevo apodo) sino gracias a la Recepcionista Macanuda. Me acerqué a preguntarle si no había visto mi toalla y por las dudas abrió el armario donde las guardan. Y allí, sobre toda las demás toallas, como imponiéndose sobre ellas, estaba la mía, Toalla Argenta. Ya puedo ducharme normalmente… hasta que China Maligna o Indio Conspirador vuelvan a hacer otra de las suyas.
Retomando, me levanto, me cambio rápidamente y bajo a la sala de desayuno...para desayunar. Desayuno (creo que a esta altura ya se van familiarizando con la rutina) con Stefan (vale aclarar que su apellido, Montag, significa LUNES. Ya me le cagué de risa por eso, descuiden) y a los 10 minutos se nos une Guillermo. Estamos listos. Partamos! Según el mapa solo tenemos que caminar derecho unas 15 cuadras para llegar. Pero todos sabemos que los mapas mienten. Bueno, este no miente. Caminamos 15 cuadras y nos encontramos en la Old Jameson Distillery. Adentro, el paraíso. Botellas, botellitas, botellones, barriles, copas, copitas y copones de güisky. Mientras me babeo y camino como un zombie mirando estas maravillas, Stefan me recuerda que tenemos que sacar la entrada del tour. Me acerco a la caja, digo que soy estudiante, me dan el descuento apropiado y saco un billete para pagar, pero mientras lo estiro un hilo de baba que quedó colgando de la comisura de mi boca se desliza por mi mentón y se deposita sin mucha ceremonia sobre el susodicho billete. El cajero me mira y al ver la expresión de mi rostro me dice, “No te hagas drama pebete, yo estuve así toda la primer semana de laburo acá…no estás solo.” Infinitamente más tranquilo me dirijo hacia la entrada del Tour con mis dos fieles compañeros de aventuras. Voy a ser ultra sincero: el tour es una cagada, por no decir que no vale la pena. Te llevan alrededor de la fábrica en donde unas mediocres figuras de cera representan a trabajadores y te explican cómo se hace el güisky. Pero me tranquiliza pensar que, como al final de todo túnel hay luz, al final de este tour me dejarán deleitar mi paladar con varias medidas de esta bebida espirituosa. Pero al final de este túnel no hay luz, es de noche, graniza y una bandada de palomas pasa sobre le entrada y cagan sobre mi cabeza. Una mísera media medida es lo que me dan al final de tour. Es peor que nada, ya que ahora tengo el saborcito en la boca. Quieren convencerme de que gaste mis valiosos Euros en botellas y botellas para enriquecer sus cochinos y sucios bolsillos burgueses. Y casi lo logran, pero todavía estoy dentro de mis sentidos, a pesar del poder casi hipnótico de ese trago de güisky. Ah, casi me atrapan, pero se necesita mucho más para ganarle al Pelado En Europa.
De camino hacia el hostel, Stefan se las pica. Tiene que agarrar un tour que contrató y sale dentro de 10 minutos. Con el Willy seguimos nuestro camino y una vez en nuestro centro de comandos vamos a la cocina. Un cus-cus y varias charlas después (cus-cus es una comida árabe…no empiecen a decir pelotudeces, gracias) nos separamos. Yo me tengo que encontrar con Mariana (la amiga del gordito cordobés que ya sabemos que es Jujeño y se llama Guillermo) y Teresa, una gallega amiga de Mariana (la amiga del Guillermo cordobés que es un médico jujeño…o algo así). Vamos a ir a un parque que se encuentra no muy lejos del hostel a tomar unos mates. Si, mates. Mariana trajo mate. Llegamos al susodicho parque en menos de 15 minutos. O caminamos muy rápido o estaba más cerca de lo que creíamos. Una vez allí nos tiramos al solcito y que empiece la mateada. Saben que me gusta hacerlos analizar cosas, así que analicen esta situación: estoy en un parque en Dublín, en compañía de una cordobesa (si, Mariana es cordobesa, no como el falso cordobés Guillermo) y la gallega Teresa (“que soy de Valencia, no soy gallega!” “No importa gallega, todos hablan igual…es con cariño”) tomando MATE. A lo lejos se ve un grupo de pibes jugando a la pelota y en el medio del parque hay un obelisco negro. Es más petiso pero más ancho que el nuestro, por lo que la deducción científica sería que los irlandeses la tienen más ancha pero más corta que nosotros. Varios mates y charlas después (y una siestona que me tomé bajo el cálido sol irlandés, que dicho sea de paso, tengo serias sospechas de que se puede tratar del mismo sol que ilumina mi querida patria) nos vamos del parque. Ya son las 6 de la tarde y la idea es comprar cervecita y algo para comer. La cerveza es prioridad, no hace falta aclararlo. Empezamos a caminar y sin darnos cuenta pasamos por la zona de bares, Temple Bar se llama. Y la misma tentación en forma de pregunta nos invade a los 3 por igual: Y si nos tomamos una Guinness antes de volver al hostel? No hace falta hablar, nuestras miradas explican todo lo que tiene que explicarse. Cinco minutos después estamos en un barcito tomando una Guinness. El plus: hay una banda que está tocando en vivo. “Tienen una onda muy The Killers” comento. Y mis dotes superiores no me fallan, apenas termino de decir esto empiezan a sonar los acordes de Mr. Brightside. Soy un capo. Finalizada la Guinness seguimos camino hacia el supermercado. Una idea se fijó en mi cabeza: tengo que comer omelete. Les pregunto a las chicas si tienen ganas de que cocine esta noche, y si les gustan los omeletes. Obvio que si, a todo el mundo le gustan los omeletes. El canasto del super se llena entonces con huevos, jamon, queso cheddar y 10 latas de medio litro de Carlsberg, riquísima cerveza, y por sobre todas las cosas: BARATA. Volvemos al hostel y comienzo a preparar las cosas para cocinar. Los que me conocen (que son todos los que leen porque son los únicos que leen esto) saben que no cocino. Pero así como me conocen en ese aspecto también saben que me gusta demostrar cuan capo soy. No hace falta decir que ofrecerme para hacer los omeletes es solo una excusa para mostrar la grositud de este Calvo. Si vienen leyendo el blog regularmente habrán notado que todos los intentos que realicé para quedar bien fueron fallidos. Este no es la excepción. Los omeletes quedaron geniales, sinceramente me sorprendí a mí mismo, pero tengo un quemadura de segundo grado en el índice de la mano derecha por agarrar mal la sartén. De más está decir que TODOS vieron el momento en que me quemaba.
De todas formas la cena está bien. Somos Willy, Stefan, Gallega (“basta con lo de gallega!”), Mariana y yo. Apenas terminamos empezamos con las birrungas. En la otra punta de la cocina/comedor vemos a una rubietona sentada sola, comiendo un insípido arroz y tomando una cerveza. Me le acerco y la invito a unirse a nuestra improvisada previa. La muchacha, que por su acento deduzco que es yanqui, agradece la invitación y se nos une. Claire se llama. Macanuda la loca. Y lo genial es que ahora más que nada estamos obligados a hablar en inglés, algo que Mariana y Gallega quieren hacer hace rato porque necesitan practicar. Yo no tengo que practicar porque soy un capo. Y se nota. Claire me pregunta donde aprendí a hablar inglés, ya que tengo acento norteamericano. “Hollywood” es mi respuesta. Pero después le cuento de mis dos experiencias de trabajo para el imperio, Vermont y JP Morgan Chase. Apenas dije JP Morgan Chase se avivó que laburaba en el call center. La charla derivó hacia lo mal organizados que están los call center, la mierda que son los automated systems y que no debería haber call centers atendiendo desde otros países, conceptos a los cuales adhiero totalmente. Muy divertida la charla, para nosotros dos. El resto no entiende un carajo. Mejor, quiere decir que no saben lo que es tratar de llamar a un banco o a una compañía de celulares. Un rato después Claire y Gallega se despiden. Tienen que ir a dormitar. Lo mismo hace Mariana. Y yo que ya estoy medio ebrio hago lo que mejor se hacer cuando me encuentro en ese estado: IRME A LA CAMA (si, Chancha, funciono igual que al otro lado del gran charco.)

viernes, 22 de abril de 2011

Primera joda loca y DUBLIN DIA 4

Que noche, Teté! A pesar de los adornos y ornamentos que pongo a mis descripciones para hacerlas entretenidas (o esa es mi intención, al menos), anoche salimos los Fantastic 4 a tomar una Guiness para celebrar. El único inconveniente es que durante los días de semana los bares cierran temprano. De pedo encontramos uno que estaba abierto y nos metimos cuanto antes. Antes que nada tengo que hacer las presentaciones de los personajes que me acompañaban a esta altura: Guillermo, el médico que está buscando trabajo (El Gordito Cordobés que no es cordobés, es jujeño mierda!), Mariana, la amiga de Guillermo que se encuentra en la misma situación que él. Ambos vinieron con una visa de trabajo que consiguieron porque hay un convenio entre las embajadas de Irlanda y Argentina que otorga 100 visas de trabajo al año. Y por último la morocha rosarina, que lleva por nombre Marianela. Se encuentra haciendo turismo y ya que está su puso a buscar laburo, por las dudas. En fin, los Fantastic Unemployed 4 nos metimos en este bar. Adentro solo había 3 cosas: MUCHA GENTE, MUCHA CERVEZA Y MUCHA MÚSICA. Genial. Nos pedimos una Guinness para cada uno y brindis de por medio nos dedicamos a esa hermosa tarea que supone la ingesta de alcohol, intercambiando palabras sin sentido en el medio. Fue duvertido mientras duró, porque 10 minutos después un guardia nos sacó del bar. A nosotros y a todos los otros clientes. CLOSING TIME. Una vez afuera del bar nos quedamos parados como idiotas pensando que podíamos hacer. Eran las 12. La noche está en pañales (quise decirlo en inglés para que me entendiera el guardia, pero no se como decirlo…acepto sugerencias). Me doy vuelta un segundo y cuando vuelvo a mirar Marianela está charlando con dos irlandeses, que juzgando por lo colorado de sus rostros habían llegado varias pintas antes que nosotros al bar. PETER y GEORGE. Borrachos copados. Los desafío a que intenten entender lo que dice un irlandés borracho. Pero la voluntad todo lo puede. Nos hicimos entender y un rato después los irlandeses nos invitaron a unirnos a su fiesta. Se estaban quedando en un hotel no muy lejos de ahí que tenía OPEN BAR 24 HS. Genial. Pero Mariana y Guillermo se bajaron. Tenían que levantarse temprano hoy, por lo que nos saludaron y marcharon. Junto a una no muy convencida de lo que estaba haciendo Marianela y dos no muy sobrios Peter y George nos metimos en un taxi y partimos para su hotel. No pude evitar pensar “que carajo hago acá?”. La pregunta me la repetí unas 15 veces más al llegar al hotel. Los que nuestros nuevos amigos nos describieron como su hotel resultó ser un hotel 5 estrellas (del cual no recuerdo el nombre) en donde se está llevando a cabo el torneo nacional de Póker. Y el 24 hs Open Bar resultó ser un bar de la San Puta (estoy seguro que debe haber una San Puta en los anales de los libros de santos de la Iglesia…es cuestión de buscarla nomás…lo agrego a mi lista de investigaciones pendientes). El bar estaba lleno de gente, por no decir hasta las bolas, excuse my french. Y la música a todo volumen. Los irlandeses son geniales, no paramos de hablar un solo segundo. Toda la gente estaba de buen humor, te sentabas al lado de alguien y a los 5 minutos era como si fueran amigos de toda la vida. No se cómo ni por qué, pero ya tengo en mi mail la dirección de una pareja que nos invitó a pasar por Belfast para visitarlos. Varias pintas de cerveza, algunos shots de güisky y una Corona y media después decidimos que era hora de irnos. Pero no todo es color de rosa. Cuando llegamos al hostel adivinen quién era el que nos esperaba en recepción para abrirnos la puerta? (a partir de las 11.30 tenés que pasar por recepción para que te abran o sino no entrás). Si, ni más ni menos que El Indio Conspirador. Él y su sonrisa conspiradora nos preguntaron la habitación y el número. Receloso, pero consciente que no estaba en las mejores condiciones para discutir le di los datos que me pidió y entré a mi cuarto, no sin dejar de verificar como la puerta se cerraba tras de mí, sin que nadie más hubiera entrado. Nunca se puede estar seguro con estos indios. Me acosté todavía preguntándome a mí mismo que fue lo que había sucedido durante la noche. Todavía no estoy seguro, pero vamos por buen camino.
Me despierto. Nuevo día. La Guinness no me dejó resaca, genial. Pero tengo un hambre voraz. Qué me pasa? Miro el reloj y la respuesta se aparece: son las 12 del mediodía. Fuck. Me dormí todo de nuevo. De todas formas tengo demasiada hambre. No puede hacer. Hago memoria y me doy cuenta de mi error: no cené anoche. El tema del hambre está resuelto, que capo. Pero tengo una nueva pregunta: si no cené, como es que no me cayó mal todo lo que tomé anoche? Solo existe una respuesta: debo ser genéticamente superior. Si, no existe otra posibilidad. La cadena evolutiva me ha bendecido con una mutación copada que me permite escabiar sin problemas. X-MEN, allí voy. Mierda, creo que sigo en pedo. Mientras pienso todo esto noto que en mi habitación hay voces. Dos chinas están haciendo la limpieza del cuarto y no se dieron cuenta o no les importó que yo estuviera durmiendo (claramente fue la segunda…las debe haber mandado el Indio Conspirador, ya me las pagarás maldito adorador de elefantes). Un rayo de luz atraviesa mi mente: tal vez la china sepa que sucedió con mi toallón. “Hey, vos, China, quiero que me respondas la verdad, que pasó con mi toalla? Era una verde que estaba colgada ahí” (señalo hacia el perchero). “Probablemente nos la llevamos para lavarla creyendo que era de las del hostel, cuando la vea te la devuelvo.” “Más te vale que mi toalla regrese viva, maldita cosechadora de arroz, y quiero que le des un mensaje a tu jefe: NO LE TENGO MIEDO”. Dicho esto procedo a cambiarme y salgo de la habitación. Objetivos del día: conseguir una línea para mi celular (finalmente descubrí por qué no me llegaban ofertas de trabajo…mi CV no tenía número telefónico para contactarse) y después seguir buscando trabajo. Pero es viernes santo, es probable que nada esté abierto. Salgo, empiezo a caminar buscando algún lugar donde vendan teléfonos. Durante estos días vi varios, pero no tengo idea de donde están. Será cuestión de caminar. Diez minutos después consigo lo que buscaba: una casa de telefonía celular. Entro, me acerco al irlandés más caracúlico que hay en el local y le digo que necesito una línea de celular que funcione en toda Europa. El señor empieza a hablarme de las ofertas que tiene pero de golpe se le ilumina la cara. Me pregunta si soy fanático de BOPE. “Qué te pasa flaco? Yo solo quiero una línea…” pero me callo. Me doy cuenta que tengo puesta la remera del BOPE (tropa de elite, hueso duro de roher…que temon!) y nos ponemos a charlar de la peli. Genial. Cinco minutos después, por el mismo precio del chip me llevo un celular y 10 euros de carga inicial de regalo (NO, EL IRLANDÉS NO ERA PUTO…SOLO MACANUDO). Tengo celular, genial.
Sigo caminando por las calles dublinesas buscando algo que hacer, y una casa de regalos y souvenires me tienta. Una vez adentro veo un ítem que me vuela la cabeza: IRISH WHISTLE. Es una flautita re chiquita, una masa, y suena re lindo. Y no, no tengo la más mínima idea de cómo se toca. No importa. Quiero un whistle. Pero no estoy para gastos inútiles. Decido irme antes de que el Juan Impulsivo tome control de la situación. Mientras me dirijo a la salida una remera con una frase llama mi atención: “…and then i thought “feck it, i’m in Ireland”. Listo. Juan Impulsivo tomó control total. Si, tengo un whistle irlandés. Y varios meses para practicar. Soy un genio. Es solo cuestión de buscar un lugar donde no haya gente y a darle átomos. Carlos Nuñez, you’re going down bitch.
Caminando por la calle me cruzo con el personaje del día. Todos saben que en algunas culturas las mujeres tienen que llevar la cabeza cubierta; los mulsulmanes, algunos sectores de la India, las judías que no pueden mostrar el pelo, etc. Bueno. Acabo de ver a una india de la India, con la cabeza cubierta por un pañuelo muy clásico de su cultura, con detalles, etc, la cagadita esa que se ponen en la frente, como demasiado India era...pero un detalle llamó mi atención: remera de SUPERMAN. Ah, la globalización no tiene límites.
De vuelta al hostel, a ver si hoy conozco a alguien más. Además ya pasaron varias horas desde que escuché la batalla rapera entre Beethoven y Justin Bieber, estoy empezando a tener abstinencia. Hablando de música: les ordeno (si, es una orden) que bajen el disco “PEACEFUL, THE WORLD LAYS ME DOWN” de NOAH AND THE WHALE. Es el soundtrack oficial de mi viaje, real.
Pdta: Extraño. (no todo son chistes pelotudos, esto es serio gente).

jueves, 21 de abril de 2011

DUBLIN DIA 3

Antes que nada: LO DE LA NARIZ ES MENTIRA. Quise asustar a mis papis nomás.
Bueno, después que nada, ayer después de postear seguí hablando con el gordito que a esta altura ya sabemos que no es cordobés, es jujeño. Y voy a dejar de llamarlo gordito, ya veo que se le ocurre leer y no quedaría políticamente correcto denominarlo de esa manera. Su nombre es Guillermo y se acaba de recibir de médico. Luego de un largo rato de charla arreglamos para ir a ver la final de la Copa del Rey a un bar por acá cerca que pasa partidos de fúbol. Ahora, quiero que analicen conmigo esta situación. Estuve mirando la final de la Copa del Rey entre el Barca y el Real, en un bar en Dublin, tomando una cerveza alemana, rodeado de españoles e irlandeses y en compañía de un médico jujeño. Si se hubiera cruzado un Chewaca y me hubiera pedido un trago de cerveza no me hubiera extrañado para nada. Bueno, antes de entrar tuve que decidirme por un equipo. Aquellos que me conocen saben que los partidos profesionales de fútbol me importan poco y nada, por lo que mi conocimiento de la materia es nulo. Pero soy buen actor. Hice un ta-te-ti mental y decidí que votaba por el Barca. Error. Apenas entré al bar solo vi camisetas blancas del Real. Y ya había estado haciéndome el capo con Guillermo como si de verdad supiera algo, alabando al Barca. Bueno. 120 minutos de juego después terminó el partido. Gracias a Dios ganó el Real, por lo que los fans estaban contentos y no se la iban a agarrar con un pobre calvo que gritaba las jugadas del Barca. Y eso fue todo por la noche. No, mentira. Cuando llegué al cuarto me cambié y me metì en la cama a ver un capítulo de THE CAPE, que dicho sea de paso es MA-LI-SI-MA, pero la voy a mirar hasta el final, y de golpe entró una pareja rubia al cuarto para acostarse. Nos pusimos a charlar y la señorita de la pareja terminó siendo MISS AUSTRALIA 2010, que está laburando en Londres y se vino con su novio a hacer un tour por Dublin. No sé si esto sea relevante, pero ahora puedo decir que dormí en el mismo cuarto que Miss Australia 2010.
No me quiero levantar de la cama. Soñé con la Chica Grande de ayer, no estuvo bueno. Pero ya fue, no puedo quedarme encerrado en el cuarto, tengo que salir a buscarla, enfrentarla, decirle que me cagó el viaje y seguir adelente. Bueno, me levanto y encuentro que la habitación está sola. Raro, ayer a la noche había 5 personas más durmiendo acá. Miro el reloj y todo se aclara: son las 12 del mediodía. Mi plan de aprovechar todos los días al máximo está girando en este momento en las arremolinadas aguas del inodoro. Hablando de baños, tengo que bañarme. Agarro mis cosas, me dirijo a la ducha, pero me falta algo indispensable: mi toallón. Vuelvo al cuarto a buscarlo. Mi increíble memoria me dice que ayer lo deje colgado en el percherito para que se secara. Pero parece que mi memoria falla, porque no está colgada. Voy a mi mochila a ver si en un ataque de sonambulismo la guardé, pero tampoco. Parece ser (y claramente ES) que me afanaron la toalla. Justo cuando uno se acostumbra a vivir con cierto nivel de relax, sin cuidar tanto las pertenencias bajo el pensamiento “en el hostel estamos todos en la misma, hay una confianza tácita”, viene alguien y me caga. Repito: esto se parece mucho a la Argentina. Pero bueno, tengo un problema más urgente que resolver: tengo que bañarme y no tengo toalla. La opción lógica indica ir a comprarme una toalla o pedir una en recepción y luego ducharme. Pero si hago eso no tendría algo entretenido que escribir en este momento. No, vamos a hacer algo loco. Me ducho sin toalla y después averiguo como secarme. Dicho y hecho. Me di una ducha increíblemente larga y relajante. Cuando cerré la canilla volví a caer en la realidad de no tener con qué mierda secarme. Un sentimiento de incompetencia se apodera de mi ser. Pero como dijo mi buen amigo Julio, “ALEA JACTA EST”. Salí de la ducha en mi traje de Adán, abrí la puerta del baño solo lo suficiente para comprobar que no había nadie interponiéndose entre mi camino desde el baño hasta mi cuarto, y así como Dios me trajo al mundo, corrí hacia allí. Lo logré. Ahora es cuestión de trabar la puerta y esperar a que el viento de la ventana haga su efecto sobre mi húmeda piel. Me encantaría decir que fue genial, pero no lo fue. Me cagué de frío. Pero el efecto fue el deseado: me encuentro seco y listo para otro día de acción descontrolada.
Primer paso: mandar curriculums via e-mail. Simple y realizable en minutos.
Segundo paso: ir a la exposición VIKING AND MEDIEVAL DUBLIN. Es adentro de la Iglesia medieval de la que hablé el otro día. Ya la tengo ubicada en el mapa y es cuestión de caminar hacia allí. Llego relativamente rápido. El dia es hermoso y la caminata se hizo muy amena. Una vez adentro pago la entrada y me quedo charlando un rato con el irlandés que cumple las funciones de guía. Macanudo el loco. Ve que tengo colgado a Mjölnir en el cogote y se pone contento. Me levanté otro flaco, THUMBS UP FOR JUAN!!!. Antes de que la conversación derive en otros temas no tan agradables como la cultura vikinga, lo saludo y empiezo el recorrido. La expo se divide en 3 pisos: 1) VIKING DUBLIN, 2)MEDIEVAL DUBLIN, 3)ARCHEOLOGISM. Genial la expo. No hace falta decir que el primer piso hizo las delicias de vuestro servidor. Me quedé promedio media hora en cada sala leyendo y releyendo las cosas que había en las paredes. Lo mismo con el segundo piso. Ultra interesante. El tercero no fue la gran cosa, pero tuvo un par de detalles interesantes. Las fotos ya están en el Facebook. No pude evitar comprarme otro Mjölnir para el cuello en la tienda de la salida (si, digo tienda porque soy muy top, si tienen algún problema vienen a decírmelo en la cara…putos).
Salgo de la expo y me voy a caminar un rato. Sigue habiendo un sol increíble y el día re da para caminar. Sin querer queriendo mis pasos me dirijen hacia un callejón que no había visto. Acabo de llegar a una suerte de Galería Bond Street dublinense. Si hubiera venido acá hace 3 años no hubiera duda en gastar todos los euros que tengo en tapados de cuero, calzoncillos con tachas y remeras de bandas desconocidas incluso por mí, pero que se ven tan cancheras. Por suerte hoy en dia prefiero guardar esa guita para cerveza y güisky. Lo divertido fue que estaba lleno de personajes extraños, igualito a la Bond Street (Rodriguez Peña al 1000, esquina Santa Fe). Es el lugar perfecto para buscar a la Chica Grande y decirle todo lo que tengo para decirle. Desafortunadamente no está. Pero no se puede esconder eternamente, ya la encontraré.
Bueno, mientras escribo estas líneas se aproxima al sillón donde me encuentro una hermosa señorita con su computadora. Apoya su valija, saca los cables y se dispone a enchufar su computador a la corriente. Solo falla en un pequeño detalle: no parece entender que las patitas de su cable jamás van a coincidir con las de la pared. Dicen que la voluntad mueve montañas, pero les aseguro que no hace coincidir enchufes cuando estos no están diseñados para hacerlo. Me le acerco y en ingles le digo que necesita conseguir un adaptador como el que tengo yo. Y se lo presto. Me sobra batería en la netbook como para poder ser gentil. Es extraño, de todas formas, porque hasta el día de hoy no había visto ninguna morocha linda aca en Dublin. Y esta lo es. Ademas de simpática y con cuerpo. Aca hago un paréntesis, más que nada destinado para los pibes. Supongamos que venimos caminando por la calle y en sentido contrario viene una rubia linda, de esas que salen en las revistas, pelo largo lasio, cara palida y fina, una cinturita para el crimen. Qué es lo primero que hacemos cuando termina de pasarnos? Le miramos el culo. Disimuladamente algunos, sin que nos importe nada a otros. El método no importa, lo que importa es que le miramos el culo. Bueno, repetimos la escena acá en Dublin. Viene la rubia, la fichamos, linda mina, pasa de largo y le miro el…nada. No tienen culo. Chato, nada, nothing, nie, cest fini, tabla. Una mierda de cuerpos loco. Mucha cara y poco envase. Es como estar caminando por el desierto y de golpe en frente tuyo aparece una coca de litro y medio, con la etiqueta brillando a kilómetros de distancia. Pero cuando llegamos no tiene nada adentro. Decepción %1000. Bueno, eso es lo que me llama la atención sobre esta señorita. Morocha linda (que ya de por si es raro) y tiene buen culo!!! Luego de unos minutos de charla termino de identificar su acento y le pregunto de donde viene. “Soy de Rosario, Argentina…vos?”. Todo tiene sentido ahora. Nos ponemos a hablar en español, claramente, y se nos unen Guillermo y su amiga, que todavía no se su nombre. Somos los Fantastic 4, estamos completos. Vamos a tomar una birra para celebrar el encuentro. “Mozo, traete 3 Quilmes para la muchachada”.

miércoles, 20 de abril de 2011

DUBLIN DIA 2

Creo que dormí con el mejor cubrecama jamás pensado. Increible. Parecía que se amoldaba a mi cuerpo mientras me movía. Parecíamos uno los dos. Creo que me enamoré. Amazing. Por otro lado: que noche más flashera. Todavía estoy tratando de dilucidar si fue verdad o fue un sueño. En la mitad de la noche, tipo 4 a.m. escuché sonar la CANDY CAVE SONG, de CHARLIE, THE UNICORN. Abrí los ojos y estoy seguro que vi a alguien acercarse a un celular como para apagarlo. Claramente lo primero que hago al despertarme es preguntarle a mi vecinita si fue ella. No tiene la más mínima idea de que es la CANDY CAVE SONG o CHARLIE, THE UNICORN. Me mira como diciendo “pobre, debe estar alucinando”. A esta altura creo que ya no tengo que decirlo….NO LA PONGO MÁS. Pero estoy seguro que no fue un sueño. Después le voy a preguntar a las otras ocupantes de la habitación. No puedo estar tan de la nuca.
Planes para el día de hoy: conseguir mi PPS NUMBER, esa suerte de SOCIAL SECUTIRY NUMBER del que escribí ayer y que es lo que me va a permitir trabajar legalmente en Irlanda. Esperemos. Me siento en el lobby del hostel en donde hay una conexión wi fi de la puta madre. Cuevana nunca cargó series tan rápido muchachos. A este ritmo me voy a fumar todas las series en una semana. Bueno, me conecto para averiguar en Gugel como hago para obtener mi estúpido PPS NUMBER. No entiendo nada. Demasiadas páginas con contenidos idiotas y ninguna que me diga bien dónde y cómo sacar el número bendito. De golpe una voz llama mi atención. Separo la vista del monitor y en el sillón de en frente veo a un gordo enorme hablando con su mujer. En cordobés. El gordo es cordobés. Increible. Estoy en un hostel en Dublin, un martes a las 8 de la mañana y la única persona que se encuentra en el lobby conmigo es cordobesa. Nostalgia mode full on. Pero no puedo permitirme distracciones. Tengo que sacar el número cuanto antes o no voy a poder laburar, lo que significa que mi viaje termina mucho antes de lo esperado. Vuelvo a mirar la pantalla y me vuelvo a encontrar con la infinidad de páginas inútiles. Esto parece ser un trabajo para….LA RECEPCIONISTA! Me dirijo a recepción con mi mejor cara de “te voy a pedir ayuda en todo lo que necesite porque soy el cliente y el cliente siempre tiene la razón…más te vale que me ayudes bien, PUTA!”. Si, puedo decir todo eso con las expresiones de mi rostro. Es un don que tengo. Y parece ser que me entendió, porque automáticamente se puso a buscar en Gugel como hacer. Me pide mi mail y me manda desde su pc un mail con el link de la página oficial, además de marcarme en mi querido mapa donde está la oficina. Mientras ella hace esto otra voz vuelve a distraerme. Una voz de mujer pregunta en español, “hablan español?” a lo que sus interlocutores responden, “SHI” (fue un SI en gallego eso). Miro hacia arriba y veo a la otra recepcionista hablando en español argentino. No lo puedo creer. Ayer la había escuchado hablar a ella con otros clientes y hablaba inglés con más acento Irlandés que el irlandés loco de la película BRAVEHEART. Que genia. Claramente cuando terminó de hablar con los gallegos estos me le acerqué y le pregunté de donde era. Chubutense. Resulta que la loca hace 10 meses que labura acá en Irlanda y ahora se va a recorrer Europa con lo que ganó y los amigos que se hizo. Si ella pudo yo voy a poder. Le pregunto  por el laburo que ofrecen en el hostel y me tira para abajo “Mirá, vos dejá tu curriculum, pero es complicado porque al manager de acá le gusta contratar mujeres para tener en recepción. Solo tenemos un hombre laburando en todo el hostel.” Adivinen quien…ni más ni menos que El Indio Conspirador. Acá hay algo raro. Pero de nuevo tengo que matar mis impulsos detectivescos en favor de algo más urgente: conseguir el número. Vuelvo a la otra recepcionista que se quedó ahí con mi mapa mientras trataba de entender algo de lo que hablaba con la chubutense. Agarro el mapa y me voy a mi pc nuevamente, para pararme luego de dos minutos para ir de nuevo a recepción: necesito un certificado que demuestre que vivo en PADDY’S PALACE. La chubutense (que a esta altura ya se que se llama Vanina) me hace el certificado en segundos. Bárbaro, ready, set, go.
Tras 10 minutos de caminata llego a la oficina donde procesan los pedidos de PPS NUMBERS. Mi instinto me dice que va a ser un trámite rápido. Primer mundo, todo digital, las cosas se hacen bien organizadas, no hay esperas, etc. Mentira. De los cuernos, la muerte y LA BUROCRACIA no se escapa nadie. Hace una hora y media que estoy sentado esperando que llamen a mi número. Luego de repetir varias veces el tema STONES AND DAGGERS en el mp4 veo que en la pantallita esta mi número. Quiero que se imaginen un irlandés, el estereotipo de irlandés. Bueno, ese tipo me atiende. Le falta el sombrerito verde y sería un Leprechaun perfecto. Le entrego mi pasaporte y la prueba de donde resido y me dice “en 5 días te llega a tu domicilio tu PPS NUMBER. A partir de mañana llamando a este número te podemos dar el número telefónicamente asi ya podés aplicar para algún trabajo mientras te llega el certificado. Una hora y media de espera para 3 minutos de trámite. Repito: esto se parece mucho a la Argentina.
Salgo de la oficina te-vamos-a-hacer-esperar-al-pedo y empiezo a caminar, buscando lugares en donde se pida gente para laburar. Y como por arte de magia me encuentro frente al LEPRECHAUN MUSEUM. Para los ignorantes: el Leprechaun es el duendecito verde irlandés que tiene su olla de oro al final del arcoíris. Bueno, resulta que no se llama duendecito verde. Se llama Leprechaun. Un colorado re simpático nos hace de guía a mi y a los otros idiotas que se divierten con la mitología celta. Lindo paseíto la verdad, pero nada que cambie el mundo (a menos que me cruce un Leprechaun de verdad…ahora sé como actuar en ese caso).
Una vez que escapo del mágico mundo mitológico en el que me encontraba envuelto sigo mi caminata en busca de proveedores de dinero. En este momento pasan dos cosas casi simultáneas. Primero: caminando en dirección contraria a la mía viene una gorda. Pero no quiero discriminar, asi que llamémosla chica grande. Un personaje bizarrísimo esta chica grande. Para los que conocen Alterna o Requiem o alguno de esos antros les va a resultar mas fácil imaginarla: enorme, con una pollera que la misma Laura de Damas Gratis envidiaría, borceguíes, pelo rubio corto (pero corto a lo marine), pulseras, aros y maquillaje exagerado, y el detalle que se llevó todos los premios: una remera negra ajustadísima que deja relucir sus hermosas curvas con un estampado de…JUSTIN BIEBER. Chau. Mamá, vení a buscarme.
Apenas supero el shock de la chica grande se me acercan unos pibes onda medio emo punk. Me hablan. No los escucho. Me repiten. Vuelvo a no escucharlos. Apago el mp4 y me saco los auriculares. Repiten nuevamente. No entiendo nada. Piensen en como hablan los pibitos de argentina. Parecen trogloditas, no articulan, se comen letras, escupen, y demás vicios del habla. Bueno, estos pibes hacían exactamente lo mismo, per en inglés y con acento irlandés. La concha de sus madres. Después de un momento me avivo que me están preguntando si les puedo comprar escabio en el mercado de la vuelta. Acá tengo dos opciones: o les compro y trato de formar nuevas amistades puberiles que probablemente sepan donde esta la joda nocturna en Dublin o me pongo en modo garca. La elección es bastante obvia. “Miren purretes…si la ley dice que ustedes son demasiado jóvenes para tomar por algo debe ser, ahí se ven.” Soy un capo.
Luego de este desafortunado intento de los púberes dublineses por alcoholizarse a costa de su servidor, me fui a buscar trabajo…again. Pero esta vez con una ventaja. Encontré la agencia de Dublin que busca laburos. Me voy para allá, busco en su base de datos e imprimo un par de pedidos de empleados. Los curriculums están en camino. Ahora es cuestión de esperar. Y que mejor manera de esperar que volver al hostel al maravilloso mundo de la interné. Pero antes tengo que comer algo. Y estoy nostálgico, asi que decido comer algo que me recuerde a mi país. Un sabor que cuaquiera sea la frontera que se interponga entre mi ser y mi amada patria jamás va a cambiar y siempre me llenará de hermosos recuerdos…ah, Dios te bendiga BIG MAC.
Una vez en el hostel me siento a escribir este update. Si, escribo en presente sobre cosas del pasado. Pensaron que escribia mientras hacía todas las cosas que cuento? Que idiotas. (pequeña dosis de autoestima para mí que soy más inteligente que ustedes y los engañé). Dicho sea de paso: este update va dedicado a Martin “hombre cráter” Esmorris (http://www.martinbarrilete.com.ar/) y para toda la gente cursi que lea esto.
Mientras escribo vuelve a aparecer el gordo cordobés de la mañana con su amiga argentina. Claramente tengo que hacer algo, es mi chance de conocer gente. Tal vez si empiezo a hacer malabares. O si le pido un pucho. No, mi engaño se caería solo cuando empiece a toser con el humo. Mejor intento algo mas original: los saludo en español y pregunto de donde son. Una hora de charla después ya se donde conseguir boletos de avión baratos, donde está la joda a la noche y como hacer para pagar menos en todos lados. (el gordito terminó siendo jujeño, no cordobés, pero no importa…es gordito.) Será cuestión de pegar mejor onda con estos flacos y tengo joda asegurada. YO RULEO.

pdta: en la recepción volvió a aparecer el Indio Conspirador...tal vez trate de hacer un aproximamiento para averiguar sus intenciones. Si mañana no escribo llamen a Interpol. 

martes, 19 de abril de 2011

DUBLIN DIA 1

Si señores, medio de pedo y medio a mi intelecto superior, llegué a Dublin. Luego de 7 horas de colectivo, 4 horas de ferry y otra hora de colectivo, arrivé a la terminal de bonis dublinesa. Gracias a Dios que tengo guardado el marcador indeleble que usé luego del viaje en avión.
Obviamente apenas llegué no tenía ni idea que hacer, ya que eran las 6 de la matina. Por las dudas me acerqué a David, un muchacho rubietón y de barbita con el que estuve charlando durante el viaje en coelctivo. Bailarín de ballet y danzas modernas, venía de una audición en London. Me dijo que a la vuelta de la estación había un hostel bastante grande. Milagro. Primera vez que no iba a tener que caminar para llegar a ningún lado. Y así, sin más preámbulos me despedí de Deivid, “thank you very much, locura”,  y encaré al hostel. No fue difícil encontrarlo. “PADDYS PALACE HOSTEL” reza un cartel enorme arriba de su entrada principal. En realidad si fue difícil encontrarlo, porque nuestro amigo Deivid claramente confunde su izquierda con su derecha al dar indicaciones. Pero le puso onda el pibe. Una vez adentro no lo puedo creer: LO ATIENDE UN INDIO. Mierda, justo cuando creía que me había escapado. Están en todos lados. Claramente están tramando algo. Ya investigaré, pero ahora lo principal es conseguirme una cama. No puedo más. Le pregunto a don Indio por la disponibilidad del hostel, a lo que responde que tienen espacio de sobra, me pregunta que cuarto quiero, etc, etc. Muy buena atención la verdad. Sospechosamente buena. Debe tener que ver con la conspiración India. Hay un único inconveniente: el check in se puede hacer a partir de las 13.00 hs. y son las 6.35 a.m. Esto va a ser heavy. Al ver mi cara de desconsuelo y sueño infinito don Indio me ofrece un mapa de la ciudad y me dice “Si querés te hago la reserva ahora, dejas las valijas en un cuarto que tenemos con llame y te vas a recorrer la ciudad hasta las 13.00 hs, guachín”. Algo en su discurso me llama la atención. Pero tengo mucho sueño como para ponerme a elaborar que es. Como si me hubiera hipnotizado hago exactamente todo lo que dijo. Cinco minutos después estoy en la calle con mi mochilita y un mapa en las manos. Analizando el mapa me doy cuenta que de entrada Dublin es una ciudad que me va a gustar mucho más que Londres. ES DIMINUTA!!!! Puedo llegar a todos lados a pata, y no estaría caminando ni la mitad de lo que caminé en Londres. Genial. Con los ánimos reanimados encaro hacia el primer objetivo que fiché en el mapa: MEDIEVAL AND VIKING DUBLIN. Si, a full. Vamos hacia allí entonces. Mientras tanto voy mirando que ondala ciudad. Es muy raro. Por un lado no hay edificios altos, es todo muy pintorezco y clásico, pero por el otro tienen un sistema de transportes que haría que el mismo Mauricio “Bicisendas” Macri se ahogara en su propia baba. Muy moderno y muy clásico al mismo tiempo. I love it. Sigo caminando y llego a lo que parece ser una iglesia medieval. No parece, ES una iglesia medieval. Amazing (las fotos en Facebook). Me dan unas ganas incontenibles de jugar rol. Donde mierdan están Harry y el resto de la party cuando los necesito? Bueno, como era de esperarse la excursión está cerrada por la hora. Pero queda en la lista para más tarde.
Mi próximo objetivo es imprimir mi CV. Vi varios carteles en puertas de bares solicitando personal, es mi oportunidad. Ya tengo escrito el CV, y me postulo como personal de seguridad. Capo total. Lets kick some asses. Pero primero tengo que imprimir el CV. Sigo girando hasta que encuentro un cyber, claramente atendido por un chino. Copado el loco. Me imprime 10 copias en segundos. Le pago y vuelvo a esos bares que anoté en mi mapa a dejar los CV. Pero vuelvo a fallar en un detalle: están todos cerrados por la hora. Y esto es algo que noté también en Londres. Las jornadas laborales empiezan en su mayoría a las 10 de la mañana!!! Es muy tarde gente!!! Nadie madruga acá. Manga de pajeros.
Primeras impresiones de Dublin:
Es mucho más parecida a la Argentina que Londres. Para empezar ya vi un par de linyeras en la calle. Genial. También vi un kiosko, que no decía Kiosko ni nada similar, pero conceptualmente era un kiosko. Genial bis. Si llega a tener alfajores me mudo para acá definitivamente. También hay un mercado callejero de frutas, tipo MERCADO CENTRAL. La gente cruza semáforos en rojo, por el medio de la calle, sonríen, etc. Es como estar en Buenos Aires. Nostalgia mode full on. Y a todos estos parecidos le sumamos algo que no está en Bs As pero que existe en el Buenos Aires de mis sueños: en 10 minutos vi al menos 10 camiones cargados con barriles de distintas marcas de cerveza. THIS COULD BE HEAVEN FOR EVERYONE.
Bien, se hicieron las 12 del mediodía y claramente es hora de volver al hostel para hacer el maldito check in. El indio conspirador ya no está atendiendo, en su lugar hay una irlandesa preciosa que me pregunta que necesito. Le digo que ya pague por los próximos 6 dias y que necesito la llave de la habitación. Además le hago entrega de mi curriculum porque en la puerta del hostel dice que necesitan personal.  Ella sonriente me acepta el curriculum y  me entrega (la llave) de  mi nueva habitación. Lindo cuarto, amplio, luminoso y con 8 camas. No hay nadie adentro, pero hay varios bolsos. Mi increíble poder de deducción me permite saber que hay mas gente en esta habitación pero que no están en este momento. Veremos que pasa después, pero primero lo primero: pegarme una ducha y tirarme a dormir una re siesta. Pongo la alarma para las 7 de la tarde. Me despierto a las 6.45 porque unas señoritas acaban de ingresar en la habitación. Alemanas, pero la experiencia me enseñó a no hacerme el capo saludando en alemán, por lo que opto por saludarlas en inglés. Me miran extraño. Las saludo de nuevo y una me tira en alemán “no hablamos inglés”. NO LA PONGO MÁS.
Me cambio rápido y empiezo mi gira tarde/noche. Vamos a llevar el curriculum a ese lugar que estaba cerrado a la mañana. Parecia un bar re copado. Llego a la puerta y hay un irlandés trabadísimo cumpliendo las fases de patova. Sin embargo me pongo a charla con él y resulta re copado. Le digo que quiero dejar mi CV y me pregunta si tengo mi CPO No.  “Que mierda es eso guachín?”. Me explica que es una suerte de SOCIAL SECURITY NUMBER, lo necesito para poder laburar. Claramente no lo tengo, pero ya se que tengo que ir a buscarlo a alguna oficina de fax. Mañana veremos. Mientras tanto me quedo charlando con los chabones y pregunto que onda el bar. Resulta que no es ningún bar como pensé. Es un casino y stripclub. Ya me parecía extraño que la señorita escotada de la puerta me mirara tan cariñosamente. No soy tan lindo. En fin, saludo a los flacos y les digo que vuelvo mañana a entregarles el CV.
Una vez fuera del casino me dirijo hacia la zona de bares. TEMPLE BAR. Genial. Un barsito cada 2 metros, y en todos estan pasando el partido del Manchester Utd. Contra el Newcastle. Entro a uno que tiene mucha onda, además de un loco guitarreando como un campeón adentro: THE AULD DUBLINER. Una guiness y un Jameson más tarde termina el partido y me vuelvo al hostel. No aguanto más. Mañana será otro dia.

lunes, 18 de abril de 2011

LONDRES DIA 3

Para este día tengo dos planes, a saber: A)Visitar Westminster’s Abbey, ya que el sábado cuando pasé estaba cerrada claramente es algo que tengo que ver; y B) sacar mi trasero de esta ciudad que le gusta cobrar todo en libras.

Según mi mapa (y ya aprendí como usarlo bien) estoy bastante lejos de la estación de colectivos, y todavía más lejos de la Abadía Westminster. Me espera una caminata copada (LUJÁN, you’re no match for me biotch!). Pero antes que nada tengo que ir a hacer el check out del hostel. Esperen, antes que nada tengo que levantarme. Eso, Me desperté exactamente a las 8 de la matina con el dulce sonido de STILL ALIVE en mi celular (si, una masa, el celu anda sin chip, tengo back –up cámara y alarma). La cagada es que en la habitación parece que dormía mas gente, porque automáticamente empiezo a escuchar chirridos de camas, como si algo sobre ellas se moviera. Bueno, cúrtanse loco, es mi viaje, hago lo que quiero. Hubieran ido a otra habitación (vale aclarar que ayer llegue tipo 1 a.m. al cuarto y los desperté a todos también). Haciendo amigos con Juan (8). Bueno, volviendo a lo importante, me levanto, saludo a la alemana que hasta hace segundos dormia en la cama de al lado (para hacerme el capo la salude en alemán, pero la muy puta me contestó en inglés, NO LA PONGO MÁS), y por si todavía quedaba alguien durmiendo me puse a desarmar y re armar mi mochila para poder cambiar de ropa. En mi viaje se madruga gente, acostúmbrense!. Quince minutos después estoy en la sala de desayuno, desayunando. Unas tostadas, una sesión de Facebook y luego a despedirme del hostel que tanto cariño y cosas me dio en estos dos días de estadia. Mentira. Unos hijos de puta. No vuelvo más.

Salgo y empiezo mi travesía hacia la estación de colectivos. Ya sé que dije que era lo segundo, pero tengo que sacar boleto antes. Mi papi me enseñó que lo primero es lo primero y no es lo segundo porque entonces seria segundo y no primero, con lo cual perdería prioridad…o algo asi. Luego de unas hermosas 10 cuadras empiezo a notar las desventajas de no tener hostel. Primero y principal (y no segundo): llevo 15 kilos de mochila en la espalda que ayer no llevaba. Y segundo (esto todavía no lo sé, pero lo voy a saber dentro de una hora aproximadamente): no tengo baño fijo. Haciendo paradas cada 10 o 15 cuadras para bajar la mochila un poco logro llegar a la mitad de mi recorrido. Alzo los ojos y veo el Palacio Fiasconham. Pero el destino me llevo allí a una hora específica: 11.30 de la mañana. De golpe recuerdo que durante una lectura de baño encontré en mi mapa una nota al margen que decía que a las 11.30 se realiza el cambio de guardia, evento que se considera un show en sí solo. Y como no me gusta desperdiciar oportunidades decido quedarme a verlo. Pero parece ser que no soy el único que leyó su mapa mientras se dedicaba a la maravillosa tarea que es desechar sólidos…un millas de personas se interponen entre quién les escribe y la puerta por la cual saldrán en algunos minutos los soldados de su majestad. Pero gracias a Dios estoy curtido en el arte de los recitales, por lo que un grupo de vejetes y turistas neozelandeses no se van a interponer entre la puerta y mi agilidad. Intento pasar la primera fila de gente y caigo en la cuenta de que tengo dos apéndices que mutilan mi capacidad de movimiento: ESTÚPIDAS MOCHILAS. Resignado a mi suerte decido seguir mi camino hacia la estación de colectivos, no sin antes golpear un par de ingleses con mi mochila pasa quitarme la bronca, al grito de “sorry, I didn’t see you doña”.

Sigo caminando, bordeando los jardines del Palacio de Mierdinham (nada que ver con la Quinta de olivos, la protección acá eran: cámaras de seguridad, alambre de púas, una barra metálica con púa de 2 cm de diámetro y arriba mas alambre de púas. No probé, pero seguro que también estaba electrificado). Cuando se acaban los muros veo que llegué al Arco de Wellington, que estoy seguro que no tienen idea de lo que es, pero cuando vean las fotos lo reconocen. “Uh loco! Este monumento lo vi en las pelis, como se llama?”. Me quedo un rato para matar dos pájaros de un tiro: descansar los hombros un rato y sacar fotos. Claramente la suerte está de mi lado, porque mientras saco fotos veo que a lo lejos viene la guardia real (la que hacía minutos había cambiado posiciones) y se dirigen a través del arco. Parece ser que es el recorrido habitual, porque los caballitos iban como robots. Genial, tengo mi foto de los guardias reales, me falta acostarme con la Reina y ya está.

Sigo caminando (a todo esto van dos horas de caminata…voy a necesitar alguna abuela que sepa curar los juanetes). Llego a la bendita estación de ómnibus, colectivos, bondis, coaches, buses, etc. Hago una fila cortita y me llaman por caja 3, donde un señor de color y actitud negra me interroga como si hubiera cometido un crimen, a lo cual le respondo con mi sonrisa Colgate más resplandeciente que me dirijo a Dublin en el próximo servicio. El próximo servicio es a las 6 p.m. de la tarde me dice, sin cambiar la cara de ojete (les dije que los ingleses tienen cara de ojete por default? Bueno, lo reitero) pero que está lleno, y que el próximo es mañana a las 6 p.m. tambien. Poco convencido, compro el boleto para mañana. Esto conlleva otro problema: donde mierda duermo hoy? Encima los hostels te cobran de más si caes sin reserva el mismo día. Una cagada, pero bueno, es lo que hay. Decido distraerme y dar paso a lo primero en la lista de hoy (que a esta altura es primero y único porque claramente no me voy a ir de Londres hoy) y encaro hacia Westminster’s Abbey. No queda tan lejos, pero a esta altura no quiero saber nada de caminar. Qué hago? Camino. AMARRETE MODE FULL ON. Los pies se curan, pero las libras no se generan solas.

Es increíble como cambia el ambiente de golpe en esta ciudad. En un segundo estás caminando en un centro re movido, edificios altos, colectivos por todas partes, negocios, oficinas, y de golpe estas entre casonas antiguas, catedrales medievales, etc…parece una de las pelis de Harry Potter.

Despues de una fila de 10 minutos (las ventajas de pagar en efectivo; la fila de los que pagaban con tarjeta de crédito era 5 veces mas larga) un señor con cara y actitud de mierda me pide revisar mi mochila. Amablemente y con mi mejor sonrisa la abro y le digo que no tengo nada. Me deja pasar, pero apenas paso me llama de nuevo como retándome y me dice “no había visto esa otra mochila!!! Es demasiado grande, no podes entrar con eso”. Aquí hago una pausa. Dos cosas: como mierda hizo el viejo para no ver mi mochila de 15 kilos que llevo en la espalda? Segundo: vamos a ver quien no pasa…viejo puto. Le digo que la mochila no tiene nada más que ropa, que no es tan grande, todo acompañado con mi mejor sonrisa, que a esta altura ya se está gastando. Me dice que va a hacer una excepción ( la sonrisa lo logró!) pero que tiene que revisarme la mochila. Suena extraordinariamente bueno hasta que me recuerdo el parto que fue armarla. De todas formas no me voy a dejar ganar. Sin cambiar mi expresión abro la mochila y empiezo a sacar cosas una por una, bieeeeeeeeeeen despacito. Cuando el tipo se aviva que no voy a cambiar mi modus operandi me dice que está bien y que entre. EPIC WIN PARA EL PELADO. SONRISAS 1 – 0 OJETE FACE.

Una vez adentro saco la entrada con descuento para estudiantes (la INTERNATIONAL YOUTH CARD y la de estudiantes tienen prácticamente los mismo beneficios) y me meto. Pero a unos pasos de la entrada me detiene un señor sonriente (claramente no debe ser inglés) y me pregunta la edad para verificar si soy estudiante o no. Le digo que tengo 20 y que estoy de paseo. Me pregunta de donde vengo, sin cambiar su sonriente cara. “Aryentina” y me responde en un portuñol forzado “yo soy de Brasil!”. A esta altura empecé a oler algo extraño y decidí cambiar mi sonrisa por algo más neutral. Él siguió sonriendo. Nos pusimos a charlar un rato, me explicó como tenia que recorrer la Abadía, y de golpe y sin anestesia me pregunta “yo soy gay, vos?” CONCHA E SUMA! I knew it! “No, soy recto” me salió. Y acá quiero aclarar que lo mio fue un problema idiomático, no un chiste verde. En inglés HETEROSEXUAL se dice “STRAIGHT”, cuya traducción literal es “RECTO”. Entre el laburo en Teletech y estos 3 días aca me acostumbré a pensar en inglés para poder hablar más rápido, pero claramente tienen sis efectos adversos. De todas formas el brasuca entendió que jugamos para equipos distintos y me saludó amablemente.

En la entrada de la Abadia te ofrecen mapas y guías de audio para que la recorras, gratarola. Me acerco a la señorita que entrega los dispositivos con la audioguía y me pregunta en qué idioma lo quiero. “Inglés, asi practico” le digo sonriendo. Me sonrió y me entregó uno. La esperanza renace. J

Arranco con la pista de audio número 0. Y lo primero que dice es “Welcome to the Westminster Abbey. I’m Jeremy Irons and I will be your guide.” Me saco el auricular y mando restart. “…I’m Jeremy Irons and…” Ya está. Estos guachos contrataron a Jeremy Irons para que haga los audios en inglés de la guía. Son unos genios. Me levantaron la tarde.

Bueno, para describir la Abadia podría estar años, realmente años. Y la cagada es que adentro no te dejan sacar fotos. Pero es algo que no vale la pena describir, tienen que verlo por sus propios ojos. Aquel que disfrute tanto de la arquitectura como de la historia puede llegar a tener un paro cardiovascular ahí adentro. Papá, estoy seguro que vos sos uno de ellos. Y Lolo también, con lo que le gustaba la arquitectura.

Lo más importante a saber de la Abadia es que es el lugar utilizado desde hace más de 700 años para la coronación real, los casamientos reales, los entierros reales y todo lo que tenga la palabra real adelante y requiera de una iglesia.

Conocí las tumbas de: ENRIQUE V, ENRIQUE VIII, SHAKESPEARE, LAWRENCE OLIVIER, NEWTON y DARWIN, entre otros más. Muy linda la tumba del GUERRERO DESCONOCIDO. Muy emotivo. Fotos de las tumbas no pude sacar porque había sabuesos vigilantes, estos ingleses tienen gorras por todos lados. Todos los grandes reyes y reinas de Inglaterra están enterrados acá. Además está la silla de la coronación (los que vieron THE KINGS SPEECH saben de lo que hablo), pero están haciéndole un service asi que no está a la vista. Me comentó un guardia que se le cagó el embrague.

Girando y girando se me hacen las 5 de la tarde. Y no se si fue porque estaba en la Iglesia o porque soy una persona que suele tener flashes re copados, se me ocurre que tengo que ir a la estación de bondis antes de las 6 de la tarde. En una de esas algún pasajero no llega y yo me puedo subir, con lo cual ahorro una noche de hostel y llego a Dublin un dia antes. Medio a las corridas, evitando las previas paradas cada 10 cuadras (esto me va a doler dentro de un rato) entro a caminar hasta la estación. Llego un rato antes que salga el bondi. Y parece que lo que se me ocurrió a mi espontáneamente y que me pareció una idea re original es en realidad algo re común. Hay una fila para pasajeros de último minuto. 5 minutos antes de que salga el colectivo se hace el último llamado y si queda espacio se procede con estos pasajeros. No hace falta decir que estoy camino a Dublin. Adiós Londres y tus estúpidas libras.

Gente que perdió tiempo leyendo: